Llegan las primeras subidas de precio por la guerra arancelaria: pañales, teléfonos y helados serán más caros

Madrid

La subida de los aranceles y el encarecimiento de algunas materias primas están obligando a muchas compañías a aumentar sus precios de venta. Lo han reconocido muchas de ellas esta semana durante las presentaciones de resultados del primer trimestre. Aunque Donald Trump ha pausado durante 90 días los aranceles recíprocos que entraron en vigor del 9 de abril, sí se está aplicando el arancel general del 10% a todos los productos que entran a Estados Unidos. Y eso está ya aumentando los costes para muchas empresas.

Las grandes cadenas de distribución y los gigantes empresariales del consumo son los más perjudicados. Esta semana tanto Procter&Gamble como Unilever han reconocido que tendrán que subir el precio de sus productos: en su portfolio están desde la mayoría de marcas de productos de higiene hasta grandes nombres de la alimentación.

Este jueves Pampers, una de las principales empresas de pañales del mundo, ya ha anunciado que va a subir el precio de sus productos. Unilever que es la dueña entre muchos otros del desodorante Dove o de los helados Frigo también dice que ha subido los precios un 1,7% en el primer trimestre y que va a seguir haciéndolo por el entorno comercial.

Subidas del café y el chocolate

A ellos se suma Nestlé que también ha comunicado una subida de precios que afecta a algunos de sus productos, entre los que destacan el café o el chocolate. En este caso, al impacto arancelario, hay que sumarle el encarecimiento de la materia prima porque tanto el café como especialmente el cacao han disparado su precio los últimos años por culpa de la sequía en las principales zonas productoras.

También las compañías de lujo siguen la estrategia de subir precios. Hermés ha anunciado que va a reforzar la producción en Europa y asume que la imposición de aranceles a sus productos cuando entren en Estados Unidos obligará a subir los precios para los norteamericanos. Aunque en el caso del luego, el poder adquisitivo del consumidor ayudará a que no se reduzca tanto la demanda.

Aviso de las compañías automovilísticas

A esto se suma que las principales aerolíneas de Estados Unidos han avisado de una caída importante de la demanda de viajes al país. Esto les obliga a reducir su oferta de asientos para compensar el aumento de costes, como paso previo a tener que subir el precio para reducir las pérdidas.