Así se dio cuenta Manuela Carmena en el Ayuntamiento de Madrid de "cómo nos ven y nos clasifican" las personas de la limpieza
La ex alcaldesa de la capital ha relatado como fue la cesión de poderes entre ella y Ana Botella
Así se dio cuenta Manuela Carmena en el Ayuntamiento de Madrid de "cómo nos ven y nos clasifican" las personas de la limpieza
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
La exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha acudido al podcast de la Cadena SER El mono desnudo, en el que ha conversado con Juan Carlos Ortega sobre su etapa como regidora de la capital española. Un mandato en el que Carmena, junto a su partido Ahora Madrid, quiso aplicar diversas políticas progresistas.
Carmena ha relatado cómo fue aquel tiempo en el Ayuntamiento de Madrid, después del mandato de Ana Botella, del Partido Popular, quien le cedió el despacho completamente vacío. “Se había llevado todo: ni una goma, ni un lápiz, nada. Luego me contaron que, claro, lo habían quemado todo”.
A la madrileña le sorprendió que, al ceder el cargo, no hubiera ni siquiera un contacto entre Botella y ella. Aunque comprendía que a la exalcaldesa no le apeteciera hacer ese trabajo de traspaso personal, al menos —según Carmena— podrían haberlo hecho “sus secretarios o personas de confianza”. Finalmente, fue ella misma quien tuvo que gestionar todo el proceso de transición.
Carmena se sorprendió al escuchar a los secretarios de Ana Botella
“Me acuerdo que reuní a las secretarias. Estaban todas, nadie decía nada, y me dijeron: ‘Es que a nosotros nunca nos reunían, nunca hablaban con nosotros’”, explicaba Carmena, que no daba crédito ante una situación tan extraña, pero que, de alguna manera dejaba ver lo poco que se tenía en cuenta a los trabajadores de menor rango dentro del Ayuntamiento de Madrid.
Carmena confesó que “siempre se ha llevado muy bien con las personas de la limpieza” en los diferentes despachos por los que ha pasado durante sus más de 30 años de carrera: primero como abogada, después como jueza y, finalmente, como alcaldesa.
Concretamente en el Ayuntamiento, aseguró haber tenido “unas relaciones divertidísimas con la señora de la limpieza”, quien le contaba anécdotas que decidió no incluir en su último libro, Imaginar la vida: Cuatro décadas transformando lo público, en el que repasa los momentos más relevantes de su vida.
Aquella mujer le habló de ciertos comportamientos de otras personas que Carmena no quiso hacer públicos, pero que le hicieron reflexionar sobre cómo “las personas que están haciendo estas tareas para que nosotros tengamos la vida fácil nos ven y nos clasifican", según el comportamiento que tengamos con ellas.
