Así hay que preparar un nenúfar para que crezcan sus característicos pétalos púrpura

Madrid

Cada año, antes de que el nenúfar inicie el crecimiento, hay que sacar la maceta en la que se encuentra plantado bajo el agua, sacar los tubérculos y seleccionar el más grande y fuerte que veamos. De esta manera, crecerá sin competencia de otras plantas, y así conseguiremos que tenga más fuerza y más flores.

Cuando saqué la maceta el otro día, lo que me encontré fueron tres tubérculos: uno grande, otro mediano y uno pequeño. Lo que hice fue replantar el más grande y añadir a la tierra el abonado necesario para que la planta tenga todos los nutrientes necesarios para que crezca muy vigorosa.

La semana pasada hice la necesaria división de los tubérculos de nuestro nenúfar `Rhonda Kay', el mismo nenúfar que el año pasado nos dio docenas de flores de pétalos púrpura, con un centro de la flor de colores anaranjado y amarillo. Y todo en la terraza de la radio, en un gran barreño de unos 50 o 60 litros más o menos.

Recuerdo a los oyentes que para el asesoramiento sobre el cultivo de este nenúfar contamos con los consejos del mayor experto que tenemos sobre estas fascinantes plantas: Tomy Escribano. Él fue quien nos trajo esta joya de nenúfar híbrido tropical a la radio.

Lo que vi es que, de los tres tubérculos que había producido el nenúfar del año pasado, solamente el tubérculo mediano estaba brotado. Aun así, me decanté por plantar el más grande. Tomy Escribano me dijo que, si pasan 10 días y el tubérculo que planté no ha brotado, que ponga este mediano, por si las moscas. Así que mientras vemos si brota ese tubérculo grandote, mantengo estos dos en agua, a la espera.

¿Cómo son los tubérculos?

Son un poco una mezcla entre una patata y el rizoma del jengibre, de color oscuro. Los nenúfares, igual que otras plantas que tienen órganos subterráneos de reserva, generan estructuras que pueden ser temporales, es decir, que las renuevan todos los años.

Un tubérculo no deja de ser un tallo, aunque crezca bajo el agua o bajo la tierra. Entonces, al igual que un tallo, sigue creciendo en longitud. En estas plantas, la parte más vieja del tubérculo suele morir para renovarse en un tubérculo joven e incluso con otros tubérculos nuevos por completo.

Ahora, con la gran cantidad de glúcidos de reserva —azúcares— que este nenúfar tiene en su tubérculo, se desarrollará muy rápido, y en pocas semanas podremos disfrutar de nuevo de sus flores. Ojalá que para finales de mayo tengamos de nuevo alguna flor.