El Supremo vuelve a apelar a la presunción de inocencia y anula otra condena de siete años de cárcel por delito sexual

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha anulado una condena de siete años de cárcel que el Tribunal Superior de Justicia de Baleares impuso a un hombre por el presunto abuso sexual continuado sobre una joven a la que conoció en el Paseo Marítimo de Palma.

Estuvieron bebiendo y fumando, y ella se sintió indispuesta, pero no podía volver a casa porque había dicho a sus padres que dormiría en casa de una amiga. Se fue con el joven, con quien mantuvo relaciones sexuales completas sin protección. Según la víctima, le expresó que no quería hacerlo, pero no tenía fuerzas para impedirlo.

Siempre según su versión, se quedó a dormir con él por miedo y, a la mañana siguiente, fueron juntos a la parada del autobús para que ella regresara a su casa. Allí no contó nada a sus padres, pero sí llamó a una amiga, quien la convenció para acudir al médico.

Según el tribunal existe una "duda razonable"

Dice la sentencia que no basta con este testimonio y el de la amiga, porque hay tres testigos que declararon haberlos visto aquella noche bailando; que él la acompañó a la parada del autobús y que ella mantenía una actitud normal. Incluso una cuarta testigo aseguró que, días después, le preguntó a la joven por el presunto agresor, y ella respondió que estaban bien y que "no iba a pasar nada".

Estos testimonios, según el tribunal, ofrecen una "duda razonable" que impide mantener la condena. La Sala explica que "mientras la condena presupone la certeza de la culpabilidad, neutralizando la hipótesis alternativa, la absolución no presupone la certeza de la inocencia, sino la mera no certeza de la culpabilidad. Esta absolución no se deriva de la prueba de la inocencia, sino de la frustrada prueba de la culpabilidad más allá de toda duda razonable".