"Le ofendió mucho": la película mítica del cine español que estuvo a punto de ser prohibida por un aristócrata ruso
En 'Sucedió una noche' han repasado la carrera de Alfredo Mayo, quien tuvo un papel secundario en este trabajo
"Le ofendió mucho": la película mítica del cine español que estuvo a punto de ser prohibida por un aristócrata ruso
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El actor Alfredo Fernández Martínez, conocido como Alfredo Mayo, marcó una época en el cine español. Durante la década de los años 40, se convirtió en el actor predilecto de la industria, con papeles destacados en películas de gran relevancia como La florista de la reina, ¡A mí la Legión! o Deliciosamente tontos. No obstante, una de sus películas más exitosas fue El último cuplé, uno de los títulos más taquilleros y con mayor repercusión en la historia del cine español, que estuvo a punto de ser prohibido.
En Sucedió una noche, Antonio Martínez y Elio Castro repasaron la vida profesional del actor, quien encarnó al Gran Duque Vladimir de Rusia, el personaje que casi provoca la cancelación de la película que consagró definitivamente a la conocidísima actriz española Sara Montiel.
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El personaje del Gran Duque Vladimir de Rusia generó el enfado de un aristócrata ruso que ostentaba un nombre muy similar, quien se sintió ofendido e intentó, por todos los medios, impedir el estreno de la cinta. Esta acabaría convirtiéndose en la película más taquillera del cine español hasta ese momento.
El personaje era retratado como un aristócrata borracho, lo que llevó al archiduque ruso a demandar a la productora por considerarlo un retrato desfavorable. Fue entonces cuando la empresa encargada de la producción, Cifesa, llegó a un acuerdo con él: le pagó una importante suma de dinero y eliminó del guion toda referencia explícita a Vladimir de Rusia.
Esta película se enfrentó a numerosos obstáculos
Además, la producción enfrentó problemas con la censura del régimen franquista y también con la financiación. De hecho, durante algún tiempo, la película fue censurada por el régimen de Franco, ya que su trama fue considerada inmoral para la sociedad católica de la época. Se realizaron varios cambios en el guion para que pudiera ser aprobada y estrenada.
Mayo continuó trabajando, aunque su popularidad fue decayendo. Para la década de los 60, el actor mallorquín era ya considerado una reliquia del pasado. Sin embargo, su carrera resurgió gracias a su papel en La caza, de Carlos Saura, una película que recibió una excelente acogida por parte de la crítica y fue premiada en el Festival Internacional de Cine de Berlín y en los Premios San Jorge. Concretamente, Mayo recibió la Medalla de Oro del Círculo de Escritores Cinematográficos al mejor actor por este trabajo.
Almudena Grandes, ‘Open range’ y Alfredo mayo
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