Silvia Intxaurrondo: "La verdad tiene hoy más valor que nunca, por eso hay tanta gente intentando que no la encontremos"

Madrid

Silvia Intxaurrondo habla de "su vida" cuando no habla de actualidad, que es un gran porcentaje de su realidad. La presentadora de TVE se ha sentado junto a James Rhodes en una charla íntima y distendida, en la que ambos han confesado admirarse y tener muchas ganas de conocerse. "Siento que te conozco muy bien porque pasamos cada mañana juntos. Tú en mi televisión y yo en mi sofá", ha bromeado Rhodes al principio de la entrevista. Para ella, la verdad no se ha perdido en su profesión, "al revés", ha asegurado, "la verdad tiene más valor que nunca, por eso hay tanta gente intentando que no la encontremos", ha sentenciado la periodista.

La conversación entre ambos ha girado en torno al compromiso: al que cada uno decide dedicar su vida, y que en el caso de Intxaurrondo, está muy centrado en el periodismo y la actualidad. Aunque no lo es todo: "Yo hablo mucho de mi vida, de mis hijos, de mi marido, de dónde voy a viajar este verano, y de cómo pasármelo muy bien con la gente a la que quiero", ha confesado.

La periodista comenzó su carrera en la SER, en Hoy por Hoy, con Iñaki Gabilondo, y desde entonces, ha pasado por grandes cadenas de televisión como Cuatro, EITB, Telemadrid o CNN+. Y los reconocimientos, durante su carrera, no han sido pocos: Intxaurrondo cuenta con un premio Iris, varios premios por la Igualdad y un Premio Ondas. Ahora, publica la novela "Solas en el silencio", algo que le hace una especial ilusión: "Desde que tengo uso de razón, yo solo quería escribir", ha sentenciado.

Para la periodista, el compromiso es "la obligación de cumplir lo pactado, y en este caso, lo pactado con uno mismo". Ella ha asegurado que pactó consigo misma que "iba a contar lo que pasase, sucediese lo que sucediese", y hoy en día, defiende que el periodismo sigue siendo periodismo, pero que, sin embargo, "hay muchos periodistas que han pervertido la profesión".

Intxaurrondo es conocida por enfrentarse a todo de tipo de entrevistados -sobre todo políticos- que tratan de sortear la verdad o, en ocasiones, decir mentiras. Y eso, pasa factura: "Hay políticos que me señalan con nombres y apellidos, desde cuentas de Twitter, en la comisión de control de RTVE o sacan mi fotografía en sesiones de control del Congreso de los Diputados", ha contado. Hubo una época, después de su polémica entrevista a Mariano Rajoy, en la que "cada día" desayunaba con una publicación de una mentira sobre ella o su entorno más cercano. "Estuve un poco perdida porque no entendía lo que estaba pasando", ha relatado. La comunicadora tiene claro el objetivo de esa persecución: "querían que diese un paso al lado".

La presentadora le dijo el 'Sí quiero' a su profesión, y también a su marido, algo que ha asegurado ser "una de las mejores decisiones" de su vida.