Harry y Meghan meditaron cambiar el apellido de sus hijos a Spencer ante los retrasos en la expedición de pasaportes
Los nuevos pasaportes incluirían el apellido Sussex, así como el título de Su Alteza Real, para ambos niños

El príncipe Harry y Meghan Markle posan para una foto. / Samir Hussein (Samir Hussein/WireImage)

Madrid
El duque y la duquesa de Sussex exploraron la idea de cambiar el apellido de sus hijos por el de la princesa Diana, como consecuencia de los retrasos constantes en la emisión de los pasaportes de los menores.
Así lo ha recogido el diario The Guardian, donde también se explica que dicha idea viene a raíz de la "pura exasperación" y que surgió durante una reunión entre el príncipe Harry y su tío Earl Spencer.

Los pasaportes del príncipe Archie y la princesa Lilibet fueron finalmente emitidos después de casi seis meses, así que la idea de adoptar el apellido Spencer se quedó en dicha conversación. De haberse hecho efectiva la modificación, recoge el medio británico, la brecha entre la familia real británica y la pareja podría haberse profundizado todavía más.
Casi seis meses para emitir los pasaportes
El tiempo normal de espera del trámite para la expedición del pasaporte en Reino Unido es de tres semanas. Sin embargo, la pareja habría tenido que presentar hasta dos solicitudes para que, tras casi seis meses, pudieran conseguir los documentos.
Fuentes cercanas a los duques de Sussex expresaron a The Guardian que Harry y Meghan temían que la tardanza podía deberse a la inclusión de distintos títulos en los documentos de los menores. Hasta 2023, en los pasaportes británico y estadounidense del hijo de los Sussex figuraba el apellido Mountbatten-Windsor; sin embargo, en esta ocasión, las solicitudes de pasaportes incluían los títulos de Su Alteza Real y el apellido Sussex.
Por su parte, recoge el medio, las autoridades británicas alegaron "problemas técnicos" para justificar la demora de tres meses en la solicitud. En consecuencia, se entiende que los duques habrían intentado tramitar el pasaporte por otra vía, aunque esta también se vio impedida por un "fallo del sistema".

El medio británico consultó tanto al Ministerio del Interior como al Palacio de Buckingham sobre los motivos para el retraso. El Ministerio indicó que su política interna les impide comentar casos individuales, mientras que Buckingham dejó claro que no haría ningún comentario personal sobre los miembros de la familia real, aunque sí que negó "haber hecho sugerencias u objeciones a que los pasaportes se emitieran con Su Alteza Real en los títulos".
Toda esta polémica viene acompañada de la pugna legal del príncipe Harry por su seguridad personal mientras se encuentra en territorio británico. El príncipe perdía este año dicha batalla legal, en la que el Tribunal de Apelaciones de Londres confirmaba que el duque de Sussex no recibiría automáticamente protección policial como antes, tras abandonar sus funciones oficiales dentro de la familia real junto a su esposa, Meghan Markle.




