Qué fue de... Fernando Hierro, la leyenda de la defensa del Real Madrid que asumió el 'marrón' de la España post-Lopetegui

Fernando Ruiz Hierro (Vélez-Málaga, España, 1968) todavía es en 2025 uno de los defensores más reconocidos en la historia del Real Madrid y de la selección española. Ídolo del Santiago Bernabéu durante los 90 y comienzos de los 2000, derrochó liderazgo para asumir el mando de una defensa que se convirtió en infranqueable con él al frente. Su explosión devolvió a los blancos al camino de la gloria europea y acercó a 'La Roja' a competir de tú a tú con las grandes potencias del mundo después de unas décadas en las que parecía imposible equipararse a los mejores.

Salió muy pronto de su tierra natal en busca de hacerse un hueco en el mundo del fútbol. Pero muy pocos podían prever hasta dónde podría llegar el nivel de aquel prometedor defensa que llegó a Pucela en 1987 avalado, sobre todo, por la figura de su hermano. Manolo Hierro, jugador del Real Valladolid por aquel entonces, le abrió las puertas del equipo. Y aunque se presuponía que en primera instancia se curtiría en el filial, el reto se le quedó pequeño muy pronto. Destrozó las puertas del primer equipo y, tras dos campañas imperiales en las que incluso disputó la final de la Copa del Rey como blanquivioleta, recibió la llamada del Real Madrid que cambió la historia de ambos.

Una carrera de blanco

Porque el nexo entre Fernando Hierro y el Real Madrid cambió el rumbo del fútbol. Aquel jovencísimo central no se amilanó lo más mínimo con la competencia de alguno de los jugadores más mediáticos del planeta. Gracias a su rigor táctico, su buen toque de balón y su polivalencia para adaptarse el medio campo, no solo se abrió hueco entre un conglomerado de estrellas entre quienes se encontraban Butragueño, Míchel o Hugo Sánchez, sino que terminó capitaneando al histórico equipo de los 'galácticos'.

Entre medias, eso sí, quedaron numerosas jornadas de gloria para el madridismo. En los anales de la historia quedaron los títulos de la Séptima, la Octava y la Novena Champions del Real Madrid, poniendo fin a una sequía de más de 30 años en Europa. En definitiva, las 14 temporadas que Hierro pasó defendiendo la camiseta blanca devolvieron al club a la primera plana mundial, volviendo a colocarse como un todopoderoso rival a batir en todo el planeta.

En más de 600 encuentros oficiales terminó defendiendo el escudo del Real Madrid, donde salió como un emblema cuyos datos dieron buena cuenta de su peso en el campo. Más de 160 goles anotó en toda su carrera, dando buena cuenta de su facilidad para golpear desde larga distancia y sorprender en el balón parado. También en sentido contrario tuvo que lidiar con la etiqueta de ser un central que nunca evitó el choque, alcanzando en su día un total de 19 expulsiones que en su día marcaron récords y que en la actualidad quedaron desfasados con el relevo de otro defensor de raza como Sergio Ramos.

El sentido 'adiós' llegó en el 2003, momento en el que Hierro se convirtió en uno de los primeros futbolistas españoles en probar suerte en el fútbol qatarí. La exótica aventura duró un año, emprendiendo el camino de vuelta a Europa al verano siguiente para vivir su último año de fútbol en las filas del Bolton inglés.

¿Qué hace ahora?

No ha perdido el tiempo desde su 'adiós' a las canchas, allá por el 2005. Fernando Hierro emprendió también carrera en los negocios. Se puso al mando de diferentes negocios, como la promotora inmobiliaria Rodiaferso o la tecnológica Bionox, además de hacerse hueco en el mundo del fútbol desde otra perspectiva.

Del césped pasó primero a los despachos, aunque con ansias a dar el salto en algún momento a los banquillos. La RFEF le acogió con los brazos abiertos para enrolarse en su organigrama como director deportivo desde 2007. Coincidió con los años dorados de la selección española, que se tradujeron en los títulos consecutivos de Eurocopa y Mundial, antes de asumir su primer reto a nivel de clubes regresando a su tierra natal. Fue el director deportivo de aquel Málaga CF que empezó a romper su techo en la temporada 2011/12. Y es que dicha campaña se cerró por todo lo alto, con la primera clasificación malacitana para la Champions League.

Hierro completó también su formación como entrenador para, ya en 2014, debutar en el interior de un cuerpo técnico dentro del organigrama del Real Madrid. Lo hizo tomando el relevo a Zinedine Zidane como asistente de Carlo Ancelotti por aquel entonces. Sin embargo, después de coger a un club en la nube tras la conquista de la 'Décima', su temporada no fue ni mucho menos igual de gratificante en cuanto a resultados. Los tres grandes títulos de la temporada cayeron en manos del Barça.

Su primera -y única- oportunidad al frente de un club le llegó en el Real Oviedo en 2017. Se curtió en este curso en Segunda, aunque el sueño del ascenso no llegó a buen puerto. Y curiosamente, no volvió a tomar las riendas de un vestuario hasta el rocambolesco giro de guion de la selección española en la antesala del Mundial de Rusia. Julen Lopetegui hizo la lista, fue despedido ya con la expedición concentrada en Rusia y Fernando Hierro, que viajó de nuevo como director deportivo de la RFEF, aceptó el 'papelón' de convertirse en seleccionador a toda prisa.

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Fue una etapa fugaz. Su último partido como entrenador todavía es aquella dichosa eliminatoria de octavos de final en la que España cayó eliminada a manos de la anfitriona en la tanda de penaltis. A partir de entonces volvió a centrarse en sus negocios, preparando a fuego lento su retorno al mundo del fútbol, aunque ya siempre con roles enfocados a direcciones deportivas. Así lo hizo en el Chivas mexicano en 2022, una etapa que concluyó el pasado verano para sumarse al reto saudí del Al Nassr junto a los Cristiano Ronaldo, Sadio Mané, Aymeric Laporte... Aunque discutido por el año en blanco del equipo en la recién finalizada temporada, el nombre de Hierro sigue muy presente en la actualidad árabe.