Testamento digital: cómo funciona la última voluntad sobre tus redes sociales, correos o conversaciones de WhatsApp

Madrid

Cuando llegamos a una edad empezamos a pensar en dejar por escrito lo que queremos que pase con nuestros bienes y cómo queremos que se haga el reparto entre nuestros herederos. Es entonces cuando pensamos en hacer un testamento vital, pero muy pocas veces solemos pensar en qué va a pasar con todo lo que también nos pertenece en Internet.

El testamento digital es una cláusula que puede incluirse dentro del testamento vital como una última voluntad o un último deseo de lo que queremos que pase con nuestros perfiles en las redes sociales, cuentas de correo, suscripciones digitales, fotos, copias de seguridad o conversaciones de WhatsApp, entre otros.

En esta cláusula podemos dejar claro qué queremos que pase con nuestros perfiles, por ejemplo, si queremos que se queden como homenaje o si preferimos que nuestros familiares los borren; pero además, podemos seleccionar a una persona concreta para que se encargue de gestionar nuestros datos si no queremos que sean, por ejemplo, nuestros hijos.

¿Qué pasa si no tenemos un testamento digital?

Según la ley, los herederos legítimos son los que tendrán derecho a exigir que nuestros datos desaparezcan de Internet o a gestionarlos como ellos quieran si no hemos dejado una instrucción clara. Aunque tener un testamento digital puede ser muy útil para facilitar las contraseñas a tus familiares, evitándoles así tener que reclamarlas a las plataformas.

Borja Adsuara es profesor de derecho y experto en derecho digital y nos ha contado que es importante no confundir el testamento digital con la herencia digital, ya que nuestros bienes digitales, como por ejemplo nuestras playlists de Spotify, no son heredables.

¿Qué necesitamos para hacer un testamento digital?

Montserrat Martín, abogada especialista de la cadena de de seguros ARAG, nos ha explicado que lo más importante a la hora de hacer un testamento digital es recabar toda nuestra actividad digital, recordar cuentas, perfiles y contraseñas; firmarlo en un documento ante notario y sobre todo, actualizar el testamento si nuestra información cambia.

Los gestores de contraseñas pueden ser una buena herramienta para evitar que tu información se desactualice, ya que permiten almacenar todas tus contraseñas de manera segura con una única clave y actualizar tu información sin tener que cambiar la clave que has dejado en tu testamento.

Teresa Barea, portavoz nacional del Consejo General de Notariado dice que el testamento digital aún no es una práctica muy habitual, aunque se cree que en el futuro tendrá cada vez más adeptos.