La hija de Ábalos reclamó dinero procedente de empresas de la trama para la fundación de su padre

Madrid

La Guardia Civil ha situado al exsecretario de Organización del PSOE Santos Cerdán en el epicentro de la trama del caso Ábalos, que ha desatado un terremoto político en Ferraz. Las conversaciones grabadas por Koldo García en poder de la Guardia Civil han permitido a la UCO unir los puntos y trazar el dibujo de una "operativa de carácter recurrente continuada en el tiempo" de amaños en obra pública en la que Santos Cerdán habría gestionado pagos de unos 620.000 euros dirigidos al exministro y quien era su asesor.

La gestión de esos pagos queda acreditada a través del papel que Santos Cerdán jugó con la empresa navarra Servinabar donde “tenía poder de decisión” para aspectos tan relevantes como “la ejecución de pagos, suministro de otros servicios y bienes a cargo de las sociedades como vehículos y teléfonos e incluso el alquiler de una vivienda en Madrid".

La hija de Ábalos

La UCO vincula a la hija de Ábalos y a Cerdán con pagos de la trama. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha acreditado que Santos Cerdán gestionó, al menos, un pago de una de las empresas vinculadas a la red de Ábalos a la Fundación Internacional para el Desarrollo Local y Social (Fiadelso), una fundación, precisamente, presidida por el propio José Luis Ábalos.

Ese pago salpica a la hija del exministro de Fomento. En concreto se hace mención al mensaje que T. Ábalos envió el 26 de junio de 2018 a Koldo García donde le reclama un pago por importe de 4.472,33 euros para Fiadelso, la fundación de su padre, indicando incluso el número de la cuenta corriente donde debía realizar la transferencia.

Solo unos días después, el 2 de julio, el propio Santos Cerdán preguntó a Koldo en qué concepto le debían mandar la factura, indicando éste que era un “donativo a una fundación”. El propio Santos Cerdán remitió a Koldo García una captura de pantalla de un correo electrónico recibido por Joseba Antxón, dueño de Servinabar 2000, en el que confirmaba que había efectuado una transferencia de 4.500 euros a una cuenta del banco BBVA.

Ese gesto “cobra importancia”, según los investigadores porque acredita que quien gestionó el abono de los fondos desde Servinabar a Fiadelso fue Santos Cerdánd. Es decir, según la UCO, de aquella conversación se deduce que Santos Cerdán disponía de “cierta capacidad de decisión sobre los fondos de Servinabar, que en este caso fueron transferidos a Fiadelso (fundación en la que figura como fundador Ábalos)”.

Además, la Guardia Civil también colige que aquel pago “pudiera ser recurrente, ya que Koldo indicó a la hija de Ábalos que el retraso en el abono “no se volvería a repetir”.