Qué fue de... Godín, el héroe del Camp Nou que marcó el gran punto de inflexión del Atlético

Diego Roberto Godín Leal (Rosario, Uruguay, 1986) fue un defensor de época que hizo de la garra uruguaya uno de los mayores emblemas de una carrera. Saltó a la liga española para confirmarse como uno de los mejores centrales de la competición en lo que va de siglo y, curiosamente, se ganó un hueco en la historia en una de sus especialidades menos reconocidas. De su cabeza salió el remate que disparó las ambiciones del Atlético de Madrid, a quien volvió a brindar un título de LaLiga después de largos años sin poder competirle el alirón a los grandes favoritos.

El fútbol de Uruguay se quedó pequeño muy pronto para unas capacidades de las dimensiones de Godín. No había cumplido ni la mayoría de edad cuando ya se había abierto hueco en la máxima categoría de su país. Tras unos primeros años en los que cumplió con creces en su primera experiencia en el CA Cerro, llegó a uno de los clubes más prestigiosos de su país, Nacional de Montevideo, para reafirmarse como un jugador destinado a ir más allá.

Europa se frotaba las manos con todo lo que podía dar de sí un central de juego aéreo imponente y con una lectura de juego privilegiada, esencial para achicar balones mediante buen posicionamiento y sin realizar grandes alardes físicos. También así llegó a ganarse un puesto con la selección charrúa, con quien debutó con apenas 19 años y con quien se convirtió en hombre récord. Prueba del peso que tuvo con Uruguay son sus 161 internacionalidades en años de bonanza, viviendo en este tiempo jornadas de gloria como en el Mundial 2010 (rozando la final) o en la conquista de la Copa América 2011.

Llegada a España en 'Submarino'

Fue el Villarreal quien pujó con mayor decisión para hacerse con los servicios de Godín cuando solo era todavía una joven promesa. Y vaya si dio resultado. Subido al 'Submarino' desde el 2007, elevó su potencial curtiéndose en sus primeras noches de Champions y ratificándose como uno de los zagueros más cumplidores de LaLiga. Llegó a ser centenario como amarillo, dejando un grato recuerdo en Castellón antes de sumarse al reto del Atlético de Madrid que terminó de catapultar su carrera.

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Porque el mejor fútbol de Diego Godín se pudo apreciar durante los nueve años que pasó en Madrid, más de siete a las órdenes de Diego Pablo Simeone. Se estrenó a lo grande, eso sí, formando parte de la zaga que maniató a todo un Inter de Milán en la Supercopa de Europa que disputaron los rojiblancos como recientes campeones de la extinta Copa de la UEFA. Pero fue Simeone quien fue capaz de exprimir al máximo a un Godín que se convirtió en el 'Faraón' total de su defensa.

Un héroe atlético en segundo plano

Gracias a toda esta confianza depositada en él salió como leyenda. Los números del Atlético se dispararon desde su llegada, estando presenta en la excelente década del 2010 en la que los colchoneros celebraron, entre otras cosas, una Copa del Rey conquistada en el Santiago Bernabéu y ante el Real Madrid, la Europa League del 2018 o el título de Liga, el gran punto de inflexión atlético en lo que va de siglo y con Diego Godín como gran héroe inesperado. Y es que el alirón liguero no se consumó hasta la última jornada y en un duelo directo de infarto contra el Barça. El Atleti se coronó después de 18 años con un último empate (1-1) en el Camp Nou que fue posible gracias a un testarazo del uruguayo que ha quedado grabado en la retina de la familia colchonera.

Muy sonada fue su despedida cuando, ya en 2019, hizo las maletas precisamente con destino al Inter después de 389 partidos con la camiseta colchonera. Ya como todo un veterano asumió en Italia su último periplo en la élite del fútbol europeo, con un último año en el Cagliari antes de regresar a Sudamérica. Brasil le recibió con los brazos abiertos en 2022 para vivir una corta etapa de unos meses en las filas del Atlético Mineiro, previa a su último reto profesional de un año el Vélez Sarsfield argentino.

¿Qué hace ahora?

Decir 'adiós' para siempre al fútbol no suele ser fácil y, en el caso de Diego Godín, terminó por ser un 'hasta luego'. No había cumplido ni un año alejado de los terrenos de juego cuando una modesta propuesta le hizo repensarse la retirada. Así, a comienzos de 2024, desempolvó las botas para sumarse al reto en el fútbol amateur de Porongos, al igual que otro mito del fútbol charrúa como el 'Chory' Castro. Con él vivió una última aventura triunfal a pequeña escala, coronándose campeón de la Copa de Clubes de la Organización de Fútbol del Interior de Uruguay antes de volver a su pleno retiro para dedicarle tiempo a su vida familiar.

Fuera de la rutina de preparación y sacrificio deportivo, sus grandes dotes defensivos y de liderazgo volvieron a verse de nuevo recientemente en un partido de leyendas. Fue una cita especial, en la que pudo reunir de nuevo el cariño de la afición del Atlético de Madrid vistiendo sus colores y acompañado de antiguos excompañeros de gratos recuerdos.

Su huella en el fútbol de élite le ha servido para sacar ahora partido de su imagen. El Godín ya exfutbolista se está encargando de exprimir todo lo posible el buen recuerdo que dejó en las canchas. Incluso fuera del foco mediático, en los últimos meses se ha consagrado como un atractivo reclamo publicitario en Uruguay, donde ha vuelto a poner su cara para una compañía de seguros. También ha recurrido a él LaLiga, quien ha contado con él como embajador en actos como el de la presentación del balón con el que se disputó el tramo final de la temporada 2024/25.