El PP aprovecha el 'caso Cerdán' para tratar de acabar con una de las pocas baronesas socialistas que le quedan a Pedro Sánchez

Madrid

Los cañones del PP apuntan ahora a Navarra. El partido de Feijóo, aprovechando la salida del Gobierno foral del número dos de María Chivite ha reorientado su estrategia de desgaste al PSOE cebándose con una de sus escasas baronesas regionales. Los populares estiran el chicle Cerdán y aumentan la presión sobre la presidenta navarra, exigiéndole su "dimisión inmediata" y la convocatoria de elecciones tras las nuevas revelaciones sobre las adjudicaciones a la empresa Servinabar 2000, vinculada al secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán.

Para doblar la apuesta, fuentes de Génova han anunciado la intención del Partido Popular de reclamar varias comparecencias en la comisión de investigación abierta en el Senado. "Citaremos a toda la rama navarra de la trama corrupta del PSOE, incluido su número dos, Ramón Alzórriz, que acaba de dejar su cargo como portavoz del PSN por la vinculación laboral de su esposa a la empresa investigada".

Entre los futuros citados a declarar figura la actual ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, que fue consejera de Hacienda y responsable de fiscalización de pagos "en el momento de la adjudicación", además de Cerdán, Alzórriz y la esposa de este último.

Asimismo, están llamados a declarar Antxón Alonso, al que el PP sitúa como "socio (o testaferro) de Santos Cerdán", el consejero de Cohesión Territorial, Óscar Chivite, "tío de la presidenta que dirige el departamento responsable de la adjudicación a Cerdán" y el exconsejero de esa misma área Bernardo Ciriza. De momento el PP se reserva la carta de citar a la presidenta navarra porque argumentan desde Génova; "nos gusta cocinar despacio".

"Puede llorar, pero no quedarse"

El principal partido de la oposición denuncia que "Chivite ha dado dinero a un compañero de partido", motivo suficiente para que tenga que "irse". "Y más", apostillaron las mismas fuentes, "teniendo en cuenta que es su propio tío, colocado por ella en la administración autonómica, quien firma las adjudicaciones de obras al propio Cerdán". "Llorar es una opción. Quedarse, no", zanjaron desde Génova.

Sobre todo este asunto acaba de hablar el líder popular. Alberto Núñez Feijóo se ha mostrado sorprendido porque "Chivite no asuma responsabilidades después de que haya cesado a su número dos". Para el jefe de la oposición "que no se asuma ninguna responsabilidad por haberse adjudicado esas obras es sorprendente, esto es un nuevo manual de política que yo no conozco".