El juez Peinado pide al Supremo que impute a Bolaños por falso testimonio y malversación en el caso sobre Begoña Gómez
Eleva exposición razonada a la Sala Segunda para que asuma la investigación de la contratación de la asesora Cristina Álvarez

El ministro Félix Bolaños. EFE/Mariscal / Mariscal (EFE)

El juez que investiga las actividad profesional de Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, ha pedido al Tribunal Supremo la imputación del ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, por presuntos delitos de falso testimonio y malversación en la contratación de la asesora Cristina Álvarez y en su declaración testifical al respecto.
En una exposición razonada a la que tuvo acceso la Cadena SER, el instructor pide al Supremo que le tome declaración como investigado y le requiera para que aporte cuanta documentación tenga a su alcance sobre el nombramiento de Álvarez cuando él ostentaba el puesto de secretario General de la Presidencia del Gobierno.
Todo, porque entiende que los trabajos desarrollados por Cristina Álvarez "no se han limitado a los de asistenta en las actividades llevadas a cabo por la esposa del presidente del Gobierno" sino para "atender" sus necesidades "en actividades de carácter privado" siendo sus retribuciones por cuenta del erario público.

"La investigación indiciariamente permite concluir que doña Cristina Álvarez ha sido nombrada como personal eventual con funciones de Directora de Programas para asistencia a la esposa del presidente del Gobierno, la también investigada Begoña Gómez. Que la persona de la investigada Cristina Álvarez ha realizado funciones de atención a Begoña Gómez de carácter estrictamente privado, al margen de cualquier acto de carácter público o protocolario, que pudiera tener por su condición de esposa del presidente del Gobierno, todo ello, percibiendo retribuciones con cargo al Patrimonio Público", dice Peinado.
Además, refiere que Boñalos "no ha contestado a la verdad que conocía en su testimonio prestado bajo juramento como testigo" cuando declaró sobre este asunto el pasado 16 de abril. La exposición razonada, que incluye transcripción de aquella comparecencia, pide al Supremo que le impute también un delito de falso testimonio en causa judicial.
Este movimiento trae cuenta de la pieza separada que abrió Peinado en la causa para analizar el nombramiento en 2018 de Cristina Álvarez como directora de programas, un cargo de confianza y libre designación, para la asistencia de la mujer del presidente del Gobierno.
En las averiguaciones sobre la cátedra extraordinaria que dirigía Begoña Gómez en la Universidad Complutense de Madrid, el nombre de Álvarez aparecía remitiendo un email a uno de los patrocinadores preguntando si seguirían contribuyendo económicamente en la iniciativa. El ex vicerrector de Relaciones Institucionales de la institución educativa la ubicó también en gestiones relativas a la cátedra.
Álvarez ya explicó que la asistía a nivel integral en una dedicación que era constante y que surgió de la relación de amistad que tenían desde hacía años. Pero Peinado preguntó en Moncloa por el nombramiento de la asesora. El vicesecretario de la Secretaría de Presidencia, de la que dependía el cargo, señaló que en la época su jefe era Bolaños y con esa referencia, le citó a declarar como testigo.
En aquella comparecencia, el ministro dio el nombre de la persona de Moncloa que emitió el certificado para nombrar a Álvarez y ahora Peinado sostiene que faltó a la verdad porque esa persona, que declaró como testigo, no fue el responsable del nombramiento.
El texto que ha enviado al Supremo le acusa de haber ofrecido "reticencias maliciosas" en su declaración y llega a decir que "cabría haber acordado la diligencia de entrada y registro en el edificio perteneciente al Complejo Presidencial de la Moncloa donde constan los archivos" para buscar el que propone el nombramiento de la asesora, cosa que no puede hacer porque se trata de un aforado.