El Auckland City se despide del Mundial de Clubes con la hucha llena

Tras el empate del Auckland City ante el Boca Juniors por 1-1 en la última jornada de la fase de grupos del Mundial de Clubes 2025, el equipo de Nueva Zelanda recibió un millón de dólares extra por sumar un punto en su grupo del torneo. A esto hay que sumarle los 2,5 millones de dólares que recibe el equipo solo por jugar esta nueva competición de la FIFA, una cifra que supera con grandes creces lo que recibe el equipo en su liga local.

Son en total 3,5 millones de dólares los que se llevará el equipo semiprofesional de Oceanía, es decir, 11.000 veces más de lo que normalmente pagan a sus jugadores (unos 320 dólares al mes). Hay que recordar que toda la plantilla del Auckland City tiene un trabajo a parte del fútbol: profesores, peluqueros, jefe de ventas en Coca-Cola,...

El fútbol como un hobby

Muchos de ellos tuvieron que pedir vacaciones para poder jugar el Mundial de Clubes. Uno de los casos más llamativos es el de Sebastián Ciganda, portero suplente del equipo oceánico. En una entrevista post partido con DSports, el uruguayo reveló como se iba a repartir el dinero conseguido en esta competición: "El premio por el empate que es de un millón de dólares, lo vamos a repartir entre el cuerpo técnico y la plantilla".

Ciganda, quien en su vida diaria trabaja como limpiador de piscinas y jacuzzis, contó los problemas que tuvo para poder venir a jugar a Estados Unidos: “En Nueva Zelanda soy limpiador de piscinas y jacuzzis. Pedí vacaciones en el trabajo o sino tenía que dejarlo. No cobré por estos días que estuvimos en Estados Unidos, cuando vuelva me reintegro a trabajar”.

El único gol del Auckland City en el Mundial de Clubes y el gol que desató la locura lo marcó Christian Gray, el delantero del equipo. Es profesor de educación física en la Escuela Primaria de Auckland y en la Escuela Intermedia Mount Roskil. “Tengo algunas tareas pendientes que se han acumulado en el último mes, así que eso es lo que voy a hacer al volver”, reconoció en tono de broma al terminar el partido.

Creo que el club se lo merece, y me alegro por los chicos

—  Christian Gray, delantero del Auckland City

"No tenemos mucho dinero, así que me alegro de que el equipo esté contento. Creo que el club se lo merece, y me alegro por los chicos", agregó el profesor de 28 años. “Estoy contento de que hayamos metido alguna. Ha sido un viaje duro. Hemos tenido algunos resultados difíciles, pero estoy feliz por el equipo y los chicos. Creo que nos lo merecemos. Hubo un ambiente especial. Boca es un club enorme, como todos los clubes que hemos afrontado en este torneo”, concluyó.

Un hito inesperado

Este empate fue considerado en Nueva Zelanda como una hazaña para el fútbol local. Medio locales han descrito la participación del Auckland City como algo inesperado, ya que el equipo recibió 16 goles en contra y cero goles a favor en los dos partidos anteriores.

Tras su participación en el torneo, la plantilla del Auckland City regresará a Oceanía para continuar la temporada en su liga, donde los futbolistas volverán de este sueño con la cabeza bien alta, pero sobre todo, con las arcas llenas.