'Akkaspace', el joven detenido por la exfiltración de datos del presidente Sánchez: "No soy nazi, es un escarmiento al Gobierno por su corrupción"

Madrid

Yoel O.Q, alias ‘Akkaspace’ lleva desde los 14 años programando y atacando servidores por encargo, “por 1.000 o 3.000 euros me piden tumbar unos servidores por unas semanas”. Ahora tiene 19 años y acaba de quedar en libertad, acusado de un delito de ciberterrorismo por difundir datos personales del presidente del Gobierno y nueve ministros, entre otros.

El auto del juez de la Audiencia Nacional, Francisco de Jorge, al que ha tenido acceso la Cadena SER, se recoge la entrevista que hicieron al propio Yoel en un canal de Twitch donde confesó que “estaba nervioso” ante una posible detención y donde reconoció cómo consiguió los datos exfiltrados que difundió en su canal de Telegram. “Tenía un bot que indexaba los datos, la gente me compraba ese bot”, explicó.

‘Akkaspace’ admite su relación con la difusión de datos personales en Argentina, a través del hacker ‘@gov.eth’ que fue acusado de publicar datos del presidente de Argentina, Javier Milei. Este ciberdelincuente confesó su ideología nazi, mostrando su admiración a Hitler y su odio hacia todos los judíos.

Sin embargo, en el caso de Yoel O.Q niega que se haya actuado por su ideología. “Nada que ver, no soy nazi, ni de extrema derecha. Ni mi compañero [alias Pakito] es nazi, ni nada”, detalló en esa entrevista en la que se limitó a explicar que son “dos chavales” que quisieron dar un “escarmiento al Gobierno” por su “corrupción” como aviso por el “daño que han hecho al país”. Si no ha publicado ningún dato de Vox, ni de Alvise Pérez, es porque “de momento no han tenido responsabilidades en el gobierno”.

El juez de la Audiencia Nacional en cambio apunta la motivación radical que reconoce el propio Akkaspace que se autodefine como "terroristas de Internet", aunque insistió en que, en este caso, actúa de manera solitaria, "un aviso" o "esto es lo mínimo que vamos a hacer".

Vendía su bot por 40 euros

Este ciberdelincuente se dedicaba a vender el bot que utilizaba para rastrear la información privada de particulares. Esa fue su propia trampa. Lo vendía por 40 euros. La Comisaría General de Información aprovechó esa información para infiltrar a un agente encubierto en su canal de Telegram, donde mostró su interés por esa herramienta. Se la vendió por 60 euros – que pagó en criptomonedas-. Esa fue la prueba definitiva que permitió a los investigadores echarle el gancho para detenerle.

Según el auto de puesta en libertad, al que ha tenido acceso la SER, Yoel vendía el acceso a su base de datos personales por cantidades variables que debían ser pagadas en bitcoins. "Los pagos iban a parar a un monedero del exchange Binance", a nombre de su socio, su amigo Cristian S.M.

Según otro de los auto consultado por la Cadena SER, el juzgado central número 1 de la Audiencia Nacional ha ordenado el clonado mediante un software forense de todas sus aplicaciones de Skype, Telegram y WhatsApp. Además, ha ordenado localizar todas sus cuentas en redes sociales y en aplicaciones de mensajería instantánea como Discord, Facebook o X “donde hubieran podido realizarse publicaciones o comunicaciones de interés para la investigación

La Audiencia Nacional también ha solicitado el cambio de claves de acceso a los equipos informático y de los teléfonos móviles para “evitar cualquier tipo de borrado” de información y asegurarla.

El magistrado también ha pedido la localización e incautación del dinero en efectivo y en tarjetas bancarias “a nombres de terceros” con el que pudieran estar “beneficiándose de los efectos del delito”. El instructor no solo busca dinero real, también criptomonedas, por eso también ha ordenado la incautación de cualquier “monedero” virtual para inmovilizar los “criptovalores”.

@Gov.eth, otro de los sospechosos

En un primer momento, el principal sospecho de los investigadores era el hacker @gov.eth, como informó la SER, porque fue la primera persona que difundió datos personales de miembros del gobierno. Pero los agentes de la Comisaría General de Información detectaron que el primer autor de las publicaciones @gov.eth “se limitó a dar publicidad a los datos que ya había obtenido” previamente Yoel, alias ‘Akkaspace’, fue él quien le facilitó la información, pero tuvo ninguna intervención en los ataques. Según se detalla en el auto, @gov.eth ha sido detenido en Argentina por hechos ajenos a esta investigación.

La investigación se centra ahora en detectar dónde ha estado la brecha de seguridad que les permitió acceder y difundir datos personales como DNI, domicilio, números de móvil y correos electrónicos.