La empresa de armas con solo cinco años de vida que enseña el camino de la UE para resistir a Trump

Madrid

Hace algo más de una semana, concretamente el pasado 26 de junio, los líderes de la OTAN se comprometían a destinar el 5% de su producto interior bruto (PIB) a Defensa de aquí a 2035. Un movimiento, auspiciado por los intereses económicos Donald Trump, que convencía a todos los países salvo a España, quien ratificaba a través de una rueda de prensa posterior de Pedro Sánchez que el país no gastará más del 2,1% al entender que podrá cumplir todos sus compromisos con las capacidades de la Alianza "en tiempo y forma": "Es suficiente y compatible con nuestro modelo social".

A partir de ese momento se ha debatido, y mucho, si es necesario destinar este 5% del producto interior bruto a Defensa o si realmente hay otro camino, como dice Pedro Sánchez. Un tema sobre el que hemos hablado en el Ministerio de ciencia y tecnología del Hoy por Hoy, donde los analistas Nuño Domínguez y Jaime García Cantero: "La pregunta del 5% no es tanto cuánto hay que gastar, sino cómo hay que gastarlo. Y ahí es donde Europa tiene muchas cosas que decir. Nadie duda de que la tecnología tiene mucho que decir en la Defensa. Más allá de lo obvio, que son los tanques que nos quiere colocar el presidente de los Estados Unidos, también hay otro tipo de tecnologías de doble uso por las que Europa debería apostar y por las que España tiene interés y capacidades reales".

La trampa de Donald Trump

Bajo su punto de vista, España y el resto de países debería aprovechar esta situación para invertir todavía más en investigación y desarrollo para poder equipararse así a otras potencias mundiales y no tener que depender tanto de las mismas: "Hay un concepto que para mí es tremendamente interesante, que es que no hay defensa posible sin autonomía digital, sin capacidad de poder tomar tus propias decisiones". Y en medio de este debate surgen ejemplos que demuestran que no estamos tan lejos como nos quiere hacer creer Donald Trump.

Incendios de sexta generación, hackers y CERN

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Uno de ellos es Helsing, una startup alemana que se ha convertido en una de las más punteras del mundo en lo que a Defensa se refiere: "Es una empresa que demuestra cosas muy interesantes. En medio de este debate que tenemos de que la industria de Defensa europea no puede competir con la estadounidense porque vamos muy tarde, Helsing ha conseguido convertirse en una de las más vanguardistas en menos de cinco años".

El caso de Helsing

Esta empresa, que proviene del mundo de la inteligencia artificial, se encarga de monitorizar todo lo que sucede sobre un campo de batalla en tiempo real para que el mando militar pueda tener una visión integrada de lo que está sucediendo. Para ello integra datos provenientes de vídeo, de sonar, de radar y tecnologías muy diferentes, con los que pueden hacerse una idea de todo lo que está sucediendo a su alrededor sin tener que abandonar la base.

Con el paso del tiempo, la tecnología ha ido evolucionando para ser todavía más precisa: "En solo 4 años han sido capaces de integrar esta tecnología en drones autónomos. Tanto en drones voladores como los que van por debajo del agua". Un paso de gigante que le ha permitido convertirse en uno de los referentes del sector: "Actualmente tiene una valoración de 12.000 millones de euros, más que algunos gigantes del sector. Además fabrica en Alemania, por lo que cumple la normativa europea y alguien les tiene que dar la orden de atacar. Por lo tanto, hablamos de una empresa muy interesante que demuestra que también hay gente haciendo cosas muy interesantes aquí cerca. Tenemos que fijarnos en estos proyectos y replicarlo desde España".