La Acrópolis de Atenas cierra unas horas por la ola de calor extremo
La medida preventiva se aplica entre las 13:00 y las 17:00 horas, que es cuando las temperaturas alcanzan los 40 grados

Turistas refugiándose en la sombra de la Acrópolis el pasado mes de junio / Milos Bicanski

Madrid
Las autoridades griegas han decidido cerrar la Acrópolis de Atenas este martes por la intensa ola de calor que azota Grecia, con el objetivo de proteger tanto a los visitantes como al personal del sitio arqueológico. El cierre podría repetirse en los próximos días si persisten las condiciones meteorológicas extremas
Este emblemático lugar ya ha sufrido el desgaste acelerado de sus estructuras por la contaminación, la erosión provocada por lluvias intensas y repentinas, y las altas temperaturas, que reducen la resistencia de los materiales antiguos, como el mármol, que se dilata y se agrieta con más facilidad. Todos estos eventos climáticos aumentan la dificultad de conservar un legado que lleva en pie más de 2.500 años.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, Grecia se enfrenta a una situación meteorológica crítica, con temperaturas que superarán ampliamente los 40 °C en varias zonas del país. Además del cierre de la Acrópolis, se han implementado otras medidas, como habilitar espacios públicos con aire acondicionado y prohibir los trabajos al aire libre entre las 12:00 y las 17:00, especialmente en sectores como la construcción o la agricultura.
Las medidas más peculiares ante la ola de calor
En Francia, con el fin de prevenir el riesgo de insolación, se ha optado por cerrar el último piso de la Torre Eiffel, situado a 276 metros de altura. Por su parte, en la República Checa, las plataformas de reparto como Glovo y Just Eat se han visto obligadas a modificar o incluso suspender sus servicios durante las horas más calurosas del día. Asimismo, en Países Bajos, las autoridades educativas han decidido adelantar la salida de los estudiantes al mediodía, como medida preventiva frente al calor extremo. Mientras tanto, en Japón, no solo se han distribuido ventiladores portátiles entre los alumnos, sino que también se han implementado sensores para controlar su temperatura corporal en tiempo real. Finalmente, en China, se han instalado rociadores de agua en las paradas de autobús, con el objetivo de refrescar a aquellos que esperan.




