Rusia en evidencia: niños robados, torturas y el derribo del vuelo MH17
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha emitido este martes su sentencia del caso Ucrania y Países Bajos contra Rusia, responsabilizándola por múltiples violaciones de derechos humanos en Ucrania, incluyendo el derribo del vuelo MH17 en 2014
Russian President Vladimir Putin / MIKHAIL METZEL / SPUTNIK / KREMLIN POOL (EFE)
Madrid
Entre los hallazgos más graves, el Tribunal ha subrayado la existencia de un programa sistemático de traslado y adopción de niños ucranianos a territorio ruso. Al menos 7.890 menores fueron llevados a Rusia entre 2014 y septiembre de 2022, la mayoría sin consentimiento legal de sus familias o tutores. Una vez allí, se facilitaron trámites para que fueran adoptados por familias rusas, con apoyo directo de las autoridades. Recordemos que en 2023 la Corte Penal Internacional emitió en 2023 una orden de arresto contra el presidente Vladimir Putin por la deportación ilegal de niños de Ucrania a Rusia. La Corte lo califica como una estrategia para “separar a los niños de sus raíces nacionales y culturales”.
La pesadilla no termina aquí, la sentencia detalla como civiles y prisioneros han sido víctimas de violaciones en grupo, esclavitud sexual, tortura y mutilaciones, muchas veces como parte de un plan de ocupación y dominación. Estas prácticas comenzaron desde el inicio del conflicto en 2014, pero se intensificaron fuertemente tras la invasión a gran escala del 24 de febrero de 2022. El TEDH señala que “El uso de la violación como arma de guerra fue sistemático y buscaba deshumanizar, humillar y quebrar la moral del pueblo ucraniano”.
Se descubre qué pasó con el vuelo MH17
En cuanto al caso del vuelo MH17, derribado el 17 de julio de 2014 con 298 civiles a bordo, la Corte considera que fue abatido por un misil. Fue lanzado desde el territorio controlado por separatistas prorrusos. Según el fallo, Rusia, no tomó medidas para proteger a los civiles y obstruyó la investigación, difundiendo información falsa.
El impacto en los familiares fue devastador pues algunos tuvieron que enterrar restos incompletos o no recuperaron los cuerpos, dice la sentencia. El texto concluye: “La continua negación de implicación por parte de las autoridades rusas y su negativa a llevar a cabo una investigación efectiva prolongaron la espera angustiosa de respuestas de los familiares y agravaron su sufrimiento”.
Aunque Rusia ya no es parte del Consejo de Europa, la Corte insiste en que el Estado sigue obligado a cumplir sus decisiones, entre ellas la liberación de detenidos arbitrarios y la devolución de los menores deportados.
