La maldición de Superman: suicidios, accidentes y tragedias reales

En 2017 se estrenó La Liga de la Justicia, una superproducción que reunía a los grandes héroes del universo DC: Superman, Batman, Wonder Woman, Aquaman y Flash. Pero lo que parecía una celebración del género de superhéroes terminó convirtiéndose en una historia marcada por tragedias personales, cambios creativos y una oscura leyenda que ha acompañado durante décadas al personaje de Superman.

La película comenzó bajo la dirección de Zack Snyder, pero una tragedia personal, el suicidio de su hija Autumn, lo obligó a abandonar el proyecto. Warner Bros encargó entonces a Joss Whedon la finalización del filme, quien reescribió y rodó nuevas escenas que alteraron significativamente el tono original. El resultado fue una cinta que decepcionó a crítica y público. Cuatro años después, en 2021, Snyder logró estrenar su versión original, el Snyder Cut, que muchos consideran una película completamente distinta.

Pero más allá del cine, la historia de Superman ha estado marcada por una serie de tragedias que muchos han calificado como una "maldición". George Reeves, el Superman televisivo de los años 50, murió de un disparo en circunstancias aún debatidas. Christopher Reeve, el Superman cinematográfico más icónico, quedó parapléjico tras una caída de caballo y falleció años después. Su compañera de reparto, Margot Kidder (Lois Lane), sufrió trastornos mentales y se quitó la vida en 2018.

Incluso los creadores del personaje, Jerry Siegel y Joe Shuster, vivieron en la pobreza durante años tras vender los derechos de Superman por una suma irrisoria. Mientras otros se enriquecían con su creación, ellos luchaban por reconocimiento y justicia.

Zack Snyder, en cierto modo, también ha sido víctima de esa maldición. Su visión artística fue truncada por una tragedia personal, y su relación con el universo DC terminó de forma abrupta. Aun así, su versión de La Liga de la Justicia ha quedado como testimonio de una lucha creativa y emocional que va más allá del cine de superhéroes.

Superman ha conocido días gloriosos, pero también ha sido testigo de un dolor muy humano. Y aunque ni Lex Luthor ni los supervillanos han logrado destruirlo, la sombra de la tragedia parece seguirlo muy de cerca.