Aitana Castaño da las claves del caso de 'Las seis de La Suiza': "Es una sentencia que busca criminalizar al movimiento sindical"

Este jueves han pasado su primera noche en prisión los miembros del grupo de sindicalistas de Gijón conocido como 'Las seis de La Suiza'. Cinco mujeres y un hombre pertenecientes a la CNT, condenados cada uno de ellos a tres años y seis meses de prisión por un delito de coacción y otro contra la administración de la justicia por las concentraciones que protagonizaron en 2017 frente a una pastelería para defender los derechos laborales de una de sus trabajadoras.

El caso se remonta a 2017 cuando la empleada denunció que los dueños de la pastelería no le pagaban las horas extra, que la explotaban, e incluso denunció sufrir acoso sexual. En una ocasión, estando embarazada, pidió marcharse a casa porque se sentía mal y el empresario se lo denegó. Después de eso, comenzaron una serie de protestas frente al local, que acabó cerrando.

El juez Lino Rubio, del juzgado número 1 de lo penal de Gijón, ordenó este miércoles su ingreso inmediato en prisión, sin contar con la opinión de la Fiscalía, que no se oponía a la petición de no aplicación de la pena que solicitó el abogado de los acusados. La periodista Aitana Castaño ha desgranado los detalles y el contexto de este caso en El Abierto del Hoy por Hoy.

"Son personas normales, una reponedora, un taxista, una profesora, que el único delito que cometieron fue participar en unas concentraciones delante de una empresa que tenía un problema con una de ellas", ha asegurado la periodista poniendo el foco en que aquellas manifestaciones nunca fueron violentas. "Llegaron a ser numerosas, unas 80-100 personas, tiraron petardos, hacían consignas contra el empresario, pero ni hubo destrozos ni nada que pudiéramos catalogar como violencia", asegura la periodista.

Parte de la sentencia apunta que la pastelería cerró por culpa de esas movilizaciones. "Dicen los sindicatos que la pastelería estaba ya cerrada o avocada al cierre, pero el juez apunta que por esas movilizaciones de La Suiza cerró, y es cierto que la familia abrió otra pastelería en Oviedo", ha indicado Castaño. Según Castaño, durante más de ocho años los seis acusados han continuado con sus vidas, siempre bajo la amenaza de una sentencia condenatoria. "Durante nueve años esta gente ha vivido con una espada de Damocles encima, pero haciendo vida normal, con sus trabajos normales".

Por otro lado, Castaño ha analizado el perfil del otro lado del conflicto, el de la familia propietaria del negocio, su abogado, y el juez Lino Rubio. En 2007 firmó una sentencia para meter en la cárcel a dos sindicalistas muy conocidos en Asturias que pertenecían a Naval Gijón, Cándido y Morala, que llegaron a estar tres semanas en la cárcel, pero estaban condenados también a tres años. "Es conocido por una posición muy conservadora, con todo lo que tiene que ver con los derechos laborales y los sindicatos", ha señalado Castaño.

La sentencia ha tenido un gran impacto en el movimiento sindical asturiano y entre los ciudadanos, según la periodista. "A mucha parte de la sociedad asturiana le da una sensación de incredulidad, no creíamos que fueran a entrar en la cárcel", ha confesado Castaño. "Y en el movimiento sindical asturiano queda claro que es una sentencia que busca criminalizar al movimiento sindical, queda la sensación de que cualquier delegado sindical o persona que se manifieste delante de una empresa que incumple los derechos laborales puede acabar en la cárcel".