El cliché se hace realidad: ya hay jubilados vigilando obras de forma profesional en Italia

Madrid

En el norte de Italia, el tradicional pasatiempo de observar obras con las manos en la espalda ha dejado de ser un estereotipo para convertirse en una actividad formal. En Villasanta, un pequeño municipio de la región de Lombardía, el ayuntamiento ha elegido a ocho jubilados para que supervisen e informen sobre las obras públicas y el mantenimiento urbano. Joan Solés, corresponsal en Italia, lo ha contado en La Ventana.

Esta iniciativa pionera, que ha despertado simpatía en redes sociales y medios locales, también podría inspirar a otros municipios con recursos limitados para reforzar el control de calidad en sus proyectos urbanos. "Otras poblaciones como Cremona se han sumado a esta iniciativa. No cobran por ello, son voluntarios. Se aseguran de que cada uno tenga una zona asignada y revisan los desperfectos, trabajando por turnos vigilando baches o farolas", ha explicado el periodista.

La medida, impulsada por el alcalde Lorenzo Galli, responde a una necesidad concreta: aumentar la vigilancia sobre el estado de infraestructuras municipales como calles, aceras, parques y zonas verdes. Pero no se trata de cualquier observador ocasional. Los seleccionados —todos hombres jubilados— cuentan con formación universitaria y experiencia en campos técnicos. Fueron elegidos tras una convocatoria pública que exigía como requisitos estar retirado, poseer título superior y acreditar trayectoria profesional en ingeniería, arquitectura o disciplinas afines.

El estado de la opinión pública sobre la jubilación en Italia vive momentos complicados. "La jubilación en Italia se está retrasando, dentro de poco llegará a los 70 años con 40 cotizados, aunque con respecto a España hay avances: se pueden contabilizar los años de carrera como años cotizados", ha explicado Solés.

El apellido Berlusconi vuelve a resonar en la política italiana

Aprovechando la conexión con Solés, se ha tratado la posible vuelta de Berlusconi a la política. No se trata del difunto ex primer ministro Silvio Berlusconi, sino de su hijo Pier Silvio, actual directivo de Mediaset, el imperio mediático fundado por su padre. Pier Silvio ha declarado públicamente que «no descarta» una futura incursión en la política, lo que ha generado revuelo en las filas de Forza Italia, el partido fundado por su progenitor.

Para Joan Solés, de tal palo, tal astilla. "Ha anunciado que va a entrar en política. Se presenta como un tipo amable y suave, como su padre hace 30 años. De hecho, ha pedido que se modernice Forza Italia", ha dicho el periodista.

El actual líder del partido y vicepresidente del gobierno, Antonio Tajani, respondió con contundencia: «Forza Italia es un partido político, no una empresa». Con esta afirmación, Tajani quiso marcar distancia entre la gestión empresarial de Mediaset y la estructura política del partido.