Un corte en el suministro de combustible provocó el accidente del avión de Air India, según un informe preliminar
La aeronave se estrelló segundos después del despegue en Ahmedabad, murieron 260 personas y solo hubo un superviviente
Así quedó el vuelo de Air India AI171 que se estrelló poco después de despegar de Ahmedabad. / RAJAT GUPTA (EFE)
Madrid
Un error en el suministro de combustible habría sido la causa del accidente del vuelo AI171 de Air India, según el informe preliminar publicado este sábado por la Oficina de Investigación de Accidentes Aéreos de la India (AAIB). El avión, un Boeing 787-8 Dreamliner, se estrelló el pasado 12 de junio pocos segundos después de despegar del aeropuerto de Ahmedabad con destino a Londres, provocando la muerte de 260 personas.
La investigación, basada en los datos recuperados de las cajas negras del avión, indica que los interruptores de corte de combustible de ambos motores fueron activados casi al mismo tiempo, apenas tres segundos después del despegue, lo que dejó a la aeronave sin propulsión y causó una caída repentina.
En las grabaciones de la cabina, uno de los pilotos pregunta al otro por qué cortó el combustible. "No lo hice", respondió su compañero. El informe no aclara cuál de los dos comandantes pronunció cada frase. El piloto al mando era Sumeet Sabharwal, de 56 años y con más de 15.000 horas de vuelo, el copiloto, Clive Kunder, de 32 años, acumulaba más de 3.400.
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Los investigadores aún no han determinado cómo se accionaron los interruptores, ya que están protegidos por mecanismos de seguridad para evitar manipulaciones accidentales. Según el informe, los motores comenzaron a reiniciarse pocos segundos después, cuando los interruptores volvieron a su posición de funcionamiento, pero el avión ya había perdido demasiada altura.
Un avión comercial se estrella en la India con 242 pasajeros
Antes del impacto, uno de los pilotos llegó a emitir un mensaje de socorro: "MAYDAY, MAYDAY, MAYDAY". Sin embargo, el controlador aéreo no recibió más respuestas. Las cámaras del aeropuerto mostraron cómo la aeronave, que apenas alcanzó los 200 metros de altura, cayó y se incendió tras chocar con varios árboles, una chimenea industrial y finalmente con un colegio, donde también se registraron víctimas.
De los 242 pasajeros a bordo, Air India informó que 169 eran ciudadanos indios, 53 británicos, siete portugueses y un canadiense. Solo una persona logró sobrevivir.
Expertos en aviación señalan que no es posible que un piloto active accidentalmente ambos interruptores en pleno vuelo. La empresa Boeing, fabricante del avión, y GE Aerospace, responsable de los motores, aseguraron que colaboran con las autoridades.
Este accidente, el más letal en una década a nivel mundial, supone un duro golpe para la aerolínea india, recientemente adquirida por el conglomerado Tata Group, que intentaba renovar su flota y recuperar su prestigio.
La AAIB continuará con la investigación para determinar las causas exactas del siniestro. Se espera que el informe final esté listo dentro de un año.