El hombre que intentó silenciar a Ana María Matute: vendió su máquina y le arrebató a su hijo
La escritora vivió entre tribunales eclesiásticos y visitas clandestinas a su hijo, mientras escribía una de sus novelas más importantes

El hombre que intentó silenciar a Ana María Matute: vendió su máquina y le arrebató a su hijo
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La historia de Ana María Matute no solo se escribe con tinta, sino también con cicatrices. Una de las más profundas ocurrió una tarde cuando al llegar a casa descubrió que su marido había vendido su máquina de escribir. No era un simple objeto, era su herramienta de trabajo, su voz, su sustento. Aquel gesto fue más que una traición doméstica; fue un intento de silenciarla.
Este episodio, junto con otros momentos decisivos de su vida, fue relatado en el pódcast Un autor en una hora, donde se reconstruye con sensibilidad la trayectoria de una de las autoras más importantes de la literatura española del siglo XX.
En 1963, Matute decidió separarse de su esposo, Ramón Eugenio de Goicoechea. Pero en la España franquista, esa decisión tenía un precio. Perdió la custodia de su hijo, ya que la ley otorgaba automáticamente la patria potestad al padre. Él se llevó al niño a Barcelona, mientras ella quedó sola en Mallorca, acogida por Camilo José Cela y su esposa Rosario Conde, quienes le ofrecieron refugio durante tres meses.
Durante más de dos años, Matute vivió una lucha silenciosa. Su exsuegra, desafiando las normas, le llevaba al niño en secreto los fines de semana. Mientras tanto, Ana María debía comparecer ante un tribunal eclesiástico que evaluaba si era "una mujer como Dios manda", en un proceso humillante que reflejaba la misoginia institucional de la época.
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Finalmente, logró recuperar la custodia. Fue una victoria íntima, pero también una herida que marcaría su vida y su obra. La experiencia de la pérdida, la injusticia y la lucha por la dignidad femenina se filtraron en sus novelas, muchas de las cuales retratan la infancia rota, la violencia soterrada y la pérdida de la inocencia.
Ese mismo año publicó Los soldados lloran de noche, segunda entrega de la trilogía Los mercaderes, donde retomó personajes de Primera memoria y narró la desaparición de Jeza, un soldado republicano. La novela, como muchas de las suyas, está atravesada por la memoria de la Guerra Civil y la posguerra, y por una mirada lúcida hacia los vencidos.
En medio del dolor, también encontró el amor. Conoció a Julio Brockard, un empresario francés al que llamaba "El Bueno". Estuvieron juntos 28 años, hasta la muerte de él en 1990. Fue su verdadero compañero, el que no intentó silenciarla, sino acompañarla.
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Un autor en una hora | Ana María Matute
Ana María Matute fue mucho más que una escritora premiada, ganadora del Premio Nadal, el Nacional de Literatura y el Cervantes. Fue una mujer que sobrevivió a la censura, al machismo, al desamor y a la pérdida. Y que, pese a todo, nunca dejó de escribir.




