Un vecino de Torre-Pacheco pide el fin de la violencia en la localidad: "Queremos la paz. Estamos hartos"
Un grupo de representantes de las cuatro mezquitas del municipio han salido a las calles para tratar de evitar más conflictos. Las mezquitas cerrarán este martes por miedo a los disturbios
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Un vecino de Torre-Pacheco pide el fin de la violencia en la localidad: "Queremos la paz. Estamos hartos"
Enviado especial a Torre-Pacheco
En las últimas horas, un grupo de personas representantes de las cuatro mezquitas del municipio ha salido a las calles de Torre-Pacheco para hablar con los jóvenes. La intención de dichos imanes y representantes con este gesto inédito es tratar de calmar la situación apelando al diálogo.
A lo largo de la jornada se ha respirado un clima de relativa tranquilidad, sin embargo, al caer la noche, parece que ha vuelto a despertar el aire de violencia en las calles de la localidad. Ante esta situación, los vecinos de la localidad han pedido el fin de la violencia en sus calles.
"Vivo en esta comunidad, soy marroquí y vivo en España. Hemos salido los mayores para intentar calmar a los jóvenes y que no suceda nada. Estamos tratando de terminar este problema lo antes posible para que se termine la violencia", ha explicado uno de "los mayores" (nombre con el que se designa a los representantes) cerca de una zona en la que se han vuelto a reunir grupos de agitadores.
"Queremos la paz. Estamos hartos, no queremos a gente delincuente. No queremos a gente que agrede a un anciano de 60 años [...]. No queremos violencia, no queremos a gente que venga de fuera a montar follones, no queremos problemas", ha concluido.
Las cuatro mezquitas de Torre-Pacheco cerrarán este martes por temor a posibles altercados. Desde la comunidad han transmitido que están asustados y preocupados por la situación, así que hacen un llamamiento a la calma y piden el fin de estos ataques de corte ultraderechista.
Además de los representantes, algunas de las madres de la comunidad de Torre-Pacheco han salido también a las calles a tratar de controlar a sus hijos, para evitar que continúe creciendo la violencia. Muchas de las familias árabes que viven en los barrios con mayor población migrante llevan allí hasta 20 años y forman parte del ecosistema de la localidad. Muchos han expresado su hartazgo ante una situación que les señala y les afecta directamente.

Javier Ruiz Martínez
Redactor de temas de sociedad, ciencia e innovación en la SER. Trabajo en el mejor trabajo del mundo:...




