"En mayo se alcanzó la dictadura total": un periodista exiliado relata la falta de libertad en El Salvador

El 1 de junio de 2019, Nayib Bukele tomó posesión como presidente de El Salvador. Solo dos años más tarde, la Sala de lo Constitucional emitió un fallo que habilitaba al presidente para la reelección con vistas de mantenerse al frente del país para un segundo gobierno, algo totalmente prohibido por la Constitución salvadoreña.

El fallo fue uno de los puntos de inflexión del primer periodo. En 2024, Bukele arrasó en las elecciones consiguiendo perpetuarse en el poder durante cinco años más. Son muchas las reformas que han causado polémica dentro y fuera de El Salvador siendo una de ellas el desmantelamiento del Estado de derecho.

La pérdida de derechos y libertades condicionan la vida de las personas. Hoy en La Ventana Americana, Marta Del Vado y Fernanda Fernández han conversado con Juan Martínez d’Aubuisson, periodista exiliado forzosamente de El Salvador. "Somos un montón de periodistas, activistas y abogados que hemos salido. En mayo se subió el último peldaño a la dictadura total", relata Martínez.

El gremio de periodistas de El Salvador ha cifrado en cuarenta los desplazamientos forzosos por la divulgación de información como las relaciones entre las pandillas y el presidente.

La familia de Juan Martínez d'Aubuisson, ligada con la historia de El Salvador

La historia de la familia de Martínez está ligada directamente con la de El Salvador. Roberto d'Aubuisson, tío de Martínez, fue acusado directamente de planear el asesinato de Monseñor Romero, un sacerdote muy popular en El Salvador conocido por la defensa a ultranza de los derechos humanos y denunciar toda la represión ejercida por el Estado.

"Mi infancia fue en los 90, justo tras la posguerra. Muy pronto comencé a darme cuenta de que mi apellido generaba un inmenso rechazo en las personas", explica Martínez. Tanto Juan como su familia firman sus crónicas con sus apellidos. Ante la pregunta de por qué lo mantiene, comenta que "para él es importante porque es el apellido de su madre, la persona que más admira en el mundo por enfrentarse a su familia y a la sociedad".

"La figura de Roberto es compleja. Es un militar que no llegó a un rango muy alto en una época donde reinaba el anticomunismo en los cuarteles. Estados Unidos formó a gente como Roberto que veía comunistas en todos lados", cuenta.