El Partido Liberal Democrático de Japón se prepara para una derrota en unas elecciones que ponen contra las cuerdas al Gobierno
El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, ha rechazado dimitir después de que los primeros sondeos apunten a la derrota de su partido

El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, durante una rueda de prensa celebrada tras los primeros sondeos que dan la derrota a su partido en los comicios de este domingo. / FRANCK ROBICHON / POOL (EFE)

Madrid
El Gobierno del primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, se tambalea este domingo después de que los primeros sondeos de las elecciones parciales con las que se buscaba renovar la mitad de los escaños del Senado. Si bien los resultados finales no se conocerán hasta la madrugada del lunes, estas primeras proyecciones confirman lo que ya venían vaticinando las primeras encuestas: el auge de una ultraderecha que podría ahora quitar la mayoría al Partido Liberal Democrático en Japón.
Un posible resultado que pone contra las cuerdas a la coalición de Gobierno, formada por la formación de Shigeru Ishiba y el partido Komeito, minoritario y de carácter moderado. A pesar de ello, el primer ministro japonés ha querido hacer un primer llamamiento a la calma y ha asegurado poco después de que se conocieran los sondeos que no dimitirá de su cargo.
Si bien ha reconocido la "gravedad" de la situación, el líder japonés ha asegurado que asumirá dicho escenario "con humildad y con sinceridad". "Hay que ser plenamente conscientes de las responsabilidades que conlleva ser el partido número uno", ha añadido.
125 escaños de 248
En total, Japón elegía este domingo 125 de los 248 escaños con los que cuenta el Senado japonés, que se renueva por mitades cada tres años. De esta forma, si se cumplen los pronósticos de los sondeos, el PLD se quedaría sin los 50 escaños que necesitaban reafirmar en estas elecciones parciales, así como esa mayoría de 125 escaños lograda hasta ahora.
En este sentido, Shigeru Ishiba no ha descartado la posibilidad de "expandir la actual coalición del Gobierno" a otros partidos, con los que no cierra la puerta a reuniones. Eso sí, ha dicho el actual primer ministro, sin renunciar a la "importancia capital" de abrir otro diálogo interno con la coalición que integra junto a Komeito.




