Saúl Ñíguez le dice que 'sí' a Filipe Luis: rompe con el Trabzonspor y acepta la oferta del Flamengo

El futuro de Saúl Ñíguez puede estar a unas horas de resolverse definitivamente. Y eso que hace apenas unas horas parecía que el desenlace ya estaba escrito después de que se cerrase su incorporación al Trabzonspor turco. Para hoy estaba previsto un vuelo directo hacia Estambul, donde el jugador, que ya tiene acordada la rescisión de su contrato con el Atlético de Madrid, iba a pasar el pertinente reconocimiento médico. Sin embargo, en las últimas horas todo ha dado un giro de 180 grados.

Saúl Ñíguez lamentó en su perfil de 'X' que no podría fichar finalmente por el club turco a pesar de estar prácticamente cerrado su llegada al conjunto de Estambul. "No funcionó por asuntos personales. Espero que nuestros caminos se vuelvan a cruzar algún día, Trabzonspor", escribió el jugador que militó la temporada pasada en el Sevilla Fútbol Club. Los "temas familiares" han sido decisivos para que se rompiese definitivamente este movimiento en el mercado de fichajes.

El nuevo destino de Saúl ya se sabe y será el Flamengo. El jugador ilicitano cambia Turquía por Brasil y apuesta por el reencuentro con Filipe Luis, leyenda rojiblanca con el que compartió vestuario durante varias temporadas ya con el Cholo Simeone en el banquillo. Una opción exótica de un equipo que viene de hace

r un gran papel en el pasado Mundial de Clubes y que con Filipe Luis en el banco están apostando por un juego valiente, ofensivo y atractivo que ha convencido definitivamente a un Saúl en busca de minutos fuera de nuestro país. Su última experiencia fuera de España fue en el Chelsea y su rendimiento no fue lo esperado, por lo que esta opción en Río de Janeiro será uno de los últimos trenes para el jugador de Elche.

En la liga carioca no ha habido muchos españoles. Los últimos han sido Hugo Mallo en el Inter de Porto Alegre, Juanfran en el São Paulo y Pablo Marí, que fue campeón en el Flamengo hace unas temporadas. Ahora Saúl busca su propia historia de la mano de un viejo conocido, su excompañero Filipe Luis.