Hora 14
Ciencia y tecnología

Diseñan un tatuaje temporal que detecta drogas en la bebida para evitar la sumisión química

Es una pegatina personalizable que identifica en segundos la presencia de GHB una droga utilizada en las agresiones sexuales

Evitar la sumisión química con un tatuaje temporal que detecta el éxtasis liquido

Madrid

El último caso se ha producido en Toledo. El Ayuntamiento de La Puebla de Montalbán ha contado que, durante la celebración de las fiestas patronales, "se han detectado dos casos de intoxicación por sustancias que anulaban la voluntad en jóvenes". Las dos chicas tuvieron que ser atendidas en el servicio de Urgencias y se activó de inmediato el protocolo Violeta.

La última estadística sobre casos de sumisión química denunciados en España es de 2022, pero la conocimos el año pasado a través del Instituto nacional de toxicología: 1.648 agresiones sexuales con sospecha de sumisión química, con un 93% de víctimas mujeres. La edad media de las afectadas es de 26 años. Según esta misma fuente, en España, una de cada tres agresiones sexuales se produce bajo los efectos de la sumisión química.

Ahora, un equipo de científicos del Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología de Ulsan (UNIST) en Corea del Sur ha presentado una posible prevención para estas situaciones. Ha desarrollado una pegatina tipo tatuaje que puede detectar instantáneamente la presencia de GHB (ácido gamma-hidroxibutírico), también conocido como "éxtasis líquido" o "droga de sumisión".

Es una sustancia depresora del sistema nervioso central -incolora e insípida- que puede provocar efectos como somnolencia, desinhibición, pérdida de conciencia y amnesia. Tiene capacidad para dejar a las víctimas indefensas y sin recuerdos claros de la agresión sexual.

"El mayor desafío con el GHB es que no tiene color, olor ni sabor, lo que lo hace casi imposible de detectar sin ayuda tecnológica", señaló la investigadora Jai Eun An. "Eso nos motivó a crear una forma proactiva de detección que no requiera equipo voluminoso ni pasos complicados".

La investigación la publica la revista científica ACS Sensors, y señala que han conseguido "un dispositivo puede identificar incluso cantidades mínimas de GHB en diversas bebidas alcohólicas y no alcohólicas en tan solo un segundo". Y todo con la forma de un tatuaje en el brazo. "Queríamos diseñar una herramienta discreta, rápida y fácil de usar que pudiera integrarse en la vida cotidiana sin levantar sospechas", ha dicho el Dr. Gyeong-Ji Kim, coautor principal del estudio.

Cómo funciona

El equipo diseñó un tatuaje temporal decorativo adherido a una delgada película plástica. En esa película hay un gel que contiene un receptor químico altamente sensible al GHB. Este sensor cambia de color —volviéndose rojo— cuando entra en contacto con la droga. La parte posterior se recubre con una solución adhesiva para fijar todo el conjunto -que es personalizable- a la piel del usuario.

En pruebas realizadas con whisky, vodka, cerveza soju (una bebida alcohólica coreana) y café, el tatuaje fue capaz de detectar concentraciones tan bajas como 0,01 microgramos de GHB por mililitro de bebida. Es una cantidad muy pequeña, por debajo del umbral que produciría efectos graves. En dosis más altas se activa con mucha rapidez.

"El proceso es tan simple como sumergir la punta de un dedo en una bebida sospechosa, tocar el tatuaje con esa gota y esperar solo un segundo para ver si hay un cambio de color", ha explicado Kyong-Cheol Ko, otro de los coautores. Y además, el cambio de color se mantiene visible hasta 30 días después para poder usarlo como evidencia ante la policía cuando se presenta una denuncia.

Los autores dicen que su diseño es muy económico y fácil de producir a gran escala para poder implantarlo en campañas de salud pública en festivales, bares, universidades y otros entornos donde los riesgos de exposición a drogas sumisión son mayores.

Javier Ruiz Martínez

Redactor de temas de sociedad, ciencia e innovación...