José Luis Sastre, sobre los ataques de Israel a Gaza: "Un Gobierno puede matar de hambre y con bombas, y que no pase nada"

Israel ha bombardeado esta madrugada las zonas en las que ayer dejó pasar unos pocos camiones cargados de comida. Van casi 60.000 muertos, de los que 17.000 eran niños. Según Unicef, es como si mataran cada día un aula con 28 niños. Ahora, Israel ha decidido matarlos también de hambre y, para que nadie proteste o protesten menos, deja entrar unos pocos camiones que, sin medidas de protección, son asaltados enseguida.

¿Qué nombre tiene retener la ayuda en la frontera y matar a la gente de hambre, o matarla a tiros mientras intenta ir a por comida? ¿Qué nombre tiene matarlos en las zonas que tú mismo has llamado seguras? ¿Qué nombre tiene dejar a la gente sin agua, sin luz, sin casas, ni hospitales, sin médicos y convertir en insoportable la vida de un pueblo en su territorio?

¿Y destruir sus casas? Ahora ya sabemos que un país, que un gobierno, puede destruir un territorio y matar a su gente de manera sistemática: matarla de hambre y con bombas, y que no pase nada.

Ahora ya sabemos que en el mundo que desarrolló la justicia universal y la comunidad internacional era posible un genocidio, que es como se llama esto, que nadie podrá decir que no sabía, y que no pasara nada más que la vergüenza que nos recordarán las generaciones que vengan.