"He llegado a pedir dinero para ir a la guerra": Antonio Pampliega explica el cambio de rumbo en su carrera

Antonio Pampliega, periodista español, fue secuestrado hace 10 años por Al Qaeda. Su cautiverio duró 299 días. Pampliega aterrizó en Siria como un periodista que iba a cubrir la guerra atroz que atravesaba el país y regresó con unas heridas emocionales que le marcaron para siempre.

'Cowboys en el infierno' (Ed Diéresis) es el resultado de 10 años de distancia con aquel secuestro. Pampliega, a través de la novela como género, narra la historia de dos corresponsales que se encuentran en Alepo cubriendo el conflicto y envolviendo al lector en una atmósfera bélica. El autor ha pasado por La Ventana para contar cómo ha sido el proceso de escritura.

"He necesitado una década para coger distancia de lo que fue Siria. He pensado mucho en cómo quería contar lo que nosotros vivimos", explica. Pampliega ejerció como periodista freelance en multitud de conflictos. Ahora ha decidido tomar otro rumbo. "Lo puedes hacer con 25 años, pero cuando llegas a cierta edad piensas si merece la pena cubrir los gastos de tu propio bolsillo. He llegado a pedir dinero para ir a la guerra", cuenta.

El periodismo freelance es una de las ramas peor remuneradas de la profesión. Pampliega afirma que lo que hay es un "enganche importante que tienes que gestionar poco a poco" aunque confiesa que "ahora está en otro punto". Uno de los motivos, según cuenta, es que "ahora tiene una niña de 4 años que está por encima de todo".

Las secuelas mentales de una guerra fue otro factor importante. "Hay una frase que aparece en el libro que es que nadie sale indemne de las guerras. Yo suelo decir que yo perdí la inocencia en Siria. La realidad es muy dolorosa y esa realidad te la tienes que llevar a casa en forma de estrés postraumático", afirma.

El tratamiento mediático de la guerra de Siria

Pampliega, al ser preguntado por cómo trataron los medios de comunicación la guerra de Gaza o Ucrania, ha comentado que "no es nadie para decir qué se está haciendo mal". Muchos medios y periodistas regresaron a la guerra un tiempo después del inicio para ofrecer una cobertura que poco a poco se fue diluyendo. "En Siria había un grupo de medios de comunicación que apostaron por volver. Yo lo comparo con Ucrania, que después de tres años sigue en primer plano, y de Siria no aparecía para nada", concluye.