Cremas solares: cómo elegir la adecuada y aplicarla bien para evitar daños irreversibles

La exposición al sol sin protección puede tener consecuencias más graves de lo que imaginamos. Las consecuencias van desde quemaduras intensas hasta un mayor riesgo de desarrollar cáncer de piel, especialmente durante los meses de verano, cuando la radiación ultravioleta alcanza sus niveles más altos. En el programa Código de Barras de la SER, el dermatólogo Eduardo López Bran, jefe del servicio en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid, advierte: "Las primeras exposiciones al sol deben ir siempre precedidas de fotoprotectores con índices elevados, no podemos subestimar el daño acumulativo que provoca el sol en la piel".

Para entender cómo elegir el protector solar adecuado, la farmacéutica María Fernández ofreció una guía personalizada: "Si tienes la piel muy clara, sensible y con tendencia grasa, lo ideal es una emulsión fluida que no aporte grasa. Y mejor aún si lo acompañas de un sérum hidratante debajo, que actúe como una pantalla adicional", explicó.

Además, Fernández recordó que no basta con proteger el rostro: "Si llevamos manga corta o tenemos tatuajes, hay que aplicar protección también en brazos, hombros y otras zonas expuestas. No obstante, una bruma invisible es perfecta para reaplicar durante el día sin complicaciones".

Por otro lado, el dermatólogo López Bran también insistió en la importancia de aplicar el fotoprotector correctamente: "Hay que hacerlo con tranquilidad, sin dejar zonas descubiertas., lo ideal es aplicarlo incluso en casa, antes de salir, para asegurarnos de que no olvidamos áreas como la espalda o las orejas".

Otro aspecto clave es el fototipo de cada persona, que determina el nivel de protección necesario. En España, donde predominan los fototipos 3 y 4, se recomienda combinar protección química y física. "El fototipo está determinado por el color de piel, ojos y cabello. Cuanto más claro sea, mayor debe ser el índice de protección", explicó el dermatólogo.

Finalmente, López Bran hizo un llamamiento especial a cuidar la piel de los más pequeños:"En la población infantil, la cantidad adecuada y la reaplicación frecuente son claves para evitar quemaduras; hay que ser especialmente cuidadosos con ellos"