Probamos la DJI Osmo 360: una cámara única en su especie para disfrutar del verano de una forma diferente

Madrid

Nada como un nuevo producto de DJI para disfrutar del verano de una forma diferente. Durante estos últimos años, la compañía de origen chino nos ha ofrecido varios productos que nos permiten filmar nuestras vacaciones de una forma innovadora. Desde cámaras tan versátiles como la DJI Osmo Pocket 3, con las que la estabilización está más que garantizada, hasta otras dirigidas al mundo del deporte como la DJI Osmo Action 5 Pro o incluso drones equipados con inteligencia artificial como el DJI Neo para que puedas filmar planos sorprendentes. A toda esta oferta de cámaras hay que sumarle una que va un paso todavía más allá.

Hablamos sobre la DJI Osmo 360, una cámara que redefine el sector 360 con sus impresionantes grabaciones de hasta 8K a 50 fps. ¿Y qué significa que sea una cámara 360? Como su propio nombre indica, que es una cámara que permite tomar fotos o grabar vídeo en todas las direcciones a la vez, capturando una esfera completa alrededor de la cámara. Imagínate, por ejemplo, que estás en el centro de una playa y te gustaría captar toda su esencia para poder volver a ese momento cuando quieras. Pues esta cámara te permite grabar lo que tienes delante, pero también lo que hay detrás, a los lados, arriba y abajo. ¿Y cómo lo consigue? Gracias a dos lentes de tipo ojo de pez instaladas en la parte posterior y anterior de la cámara que se encargan de filmar todo lo que pasa a tu alrededor. Pero como no es lo mismo contarlo que vivirlo, hemos probado la nueva DJI Osmo 360 para poder contarte nuestras sensaciones con la cámara.

Diseño robusto para todo tipo de aventuras

Antes de pasar al diseño, es importante explicar que la nueva DJI Osmo 360 ha salido a la venta este jueves en varias versiones. Desde el pack estándar, que solo incluye la cámara en cuestión, hasta otros más avanzados como el pack aventura, en el que además de la cámara se incluyen tres baterías, un estuche para cargarlas todas al mismo tiempo y un palo selfi invisible que te será de gran utilidad para grabar en 360. Por otro lado, DJI también cuenta con dos packs para instalar la cámara en distintas partes de una motocicleta para grabar todos los viajes.

En nuestro caso hemos podido probar el pack aventura, el más avanzado de todos ellos. Lo primero que nos llama la atención de la cámara nada más sacarla de su packaging original (que incluye un palo selfi) y toquetearla un poco es que estamos ante un producto robusto, pero al mismo tiempo ligero en mano. Aunque pueda parecer algo voluminosa a simple vista, más aún si las comparamos con otras cámaras de la competencia, la DJI Osmo 360 tiene unas dimensiones ideales para llevártela a cualquier lugar (81 x 61 x 36,3 milímetros). Además, es bastante ligera -solo pesa 183 gramos-, por lo que se convierte en una aliada idónea para grabar todo lo que se te venga a la cabeza durante las vacaciones.

Es ligera, pero, como te hemos explicado con anterioridad, ha sido diseñada para que puedas utilizarla incluso en las condiciones más extremas, pues cuenta con una certificación IP68 que la hace resistente al polvo y al agua y puede trabajar con temperaturas de hasta 20 grados bajo cero. El cuerpo de la cámara ha sido fabricado a partir de plástico robusto de alta resistencia de color gris oscuro, lo que le otorga esa resistencia que todos buscamos en un producto que vamos a estar llevando de un lado a otro. Por otro lado, las lentes tanto anteriores como posteriores de la cámara son de cristal y cuentan con un revestimiento multicapa diseñado para aumentar la resistencia a los arañazos. El problema que vemos en este diseño es que este cristal protector forma parte de la lente y no es reemplazable por el usuario, por lo que deberás tener bastante cuidado de no rayar este cristal.

Por último, la DJI Osmo 360 incorpora una pantalla táctil a todo color de 2,25 pulgadas. No es una pantalla abatible ni giratoria como la de la Osmo Pocket 5, pero lo cierto es que cumple con creces. Lo que más nos ha gustado de la misma tras varios días de uso es que se ve bastante bien, incluso en escenarios de alta luminosidad, gracias a su brillo máximo de 750 nits. Algo fundamental teniendo en cuenta que siempre vamos a grabar con ella en exteriores. Por otro lado, durante la instalación del dispositivo comprobamos que la respuesta táctil es rápida y precisa y que la interfaz de usuario es de lo más práctica para que nadie se pierda en ella.

Primeros pasos: de la instalación a la curva de aprendizaje

La instalación de la DJI Osmo 360 se asemeja a la de otros productos que hemos podido probar de la firma asiática. Antes que nada, descárgate la aplicación DJI Mimo para poder configurar la aplicación. Cuando hayas completado este paso, enciende la cámara y vuelve una vez más a tu teléfono móvil para vincular ambos dispositivos. Tras seguir unos cuantos pasos llegará el momento de la activación, cuando la app te pedirá activar la cámara. Un paso, que requiere de una conexión a Internet, que vincula la cámara a tu cuenta de DJI y desbloquea todas y cada una de sus funciones.

Por último, tan solo tendrás que actualizar el firmware para instalar la última actualización de la cámara y mejorar así tanto su estabilidad y el rendimiento. Y ya estaría. El proceso no te llevará más de 10 minutos y lo cierto es que es muy intuitivo. Ahora que ya hemos completado la instalación y la vinculación, comenzamos a grabar con nuestra nueva DJI Osmo 360. Para ello tendremos que dirigirnos a la pantalla táctil y seleccionar el modo de vídeo que queramos. En esta pantalla también podrás comprobar los ajustes y establecer tanto la resolución como los fotogramas.

Una vez hecho esto, y si tú también tienes el pack aventuras, coloca la cámara en el palo selfi. Pero no comiences a grabar justo a la altura de los ojos, te recomendamos que la coloques un poco por encima o por debajo del centro de acción para que la imagen final sea mucho mejor. Y cuando tengas todo listo, pulsa sobre el botón de grabar. Lo que sí que es algo más complicado es la edición del vídeo, pues estamos hablando de un formato bastante distinto al que estamos acostumbrados, pero la app DJI Mimo, así como el programa DJI Studio te ayudarán a sacar el máximo rendimiento de tus vídeos.

Calidad excelsa en foto y vídeo

Y por último toca analizar la calidad de imagen de la nueva DJI Osmo 360. Uno de los grandes reclamos de la cámara es que es una de las primeras cámaras de acción del mercado que ofrecen 8K (7680x3840) hasta 50 fps. Es bastante probable que no vayas a utilizar esta configuración en tu día a día, pues puede freír el almacenamiento interno de la cámara o la tarjeta Micro SD en cuestión de minutos, pero lo cierto es que es un auténtico puntazo que estas cámaras tan compactas puedan llegar tan lejos.

Tras estas primeras pruebas, llegamos a la conclusión de que el nivel de detalle que captura la cámara es simplemente brutal. De hecho, y dado que estamos grabando en 8K, podremos hacer un zoom digital muy agresivo y, aun así, podremos seguir disfrutando de una imagen en gran calidad. No obstante, y si no te dedicas al campo audiovisual de forma profesional, te recomendamos que grabes en 5,7K. No solo porque ahorra mucho más espacio, sino porque también tardará mucho menos tiempo en procesar.

Independientemente de la configuración que hayas escogido, la cámara siempre va a rendir a gran nivel. En escenas muy soleadas, la Osmo 360 te ofrecerá una imagen que destaca por sus colores vivos y naturales y por un contraste alto potenciado por su excelente rango dinámico. Una opción que será de gran utilidad, por ejemplo, a la hora de grabar amaneceres o atardeceres, que por norma general suelen ser más difíciles de filmar. La cámara funciona genial en condiciones de alta luminosidad, pero también en escenarios con poca luz gracias a sus sensores de una pulgada. El hecho de contar con sensores más grandes que los de su competencia le permite grabar imágenes de lo más nítidas incluso en situaciones complicadas. Además, el software se encarga de controlar el ruido y reducir el grano en la imagen al máximo.

Por último, la cámara también brilla por la calidad de su fotografía. En su modo foto, la Osmo 360 nos permite tomar imágenes esféricas de hasta 120 megapíxeles. Por lo tanto, podrás irte de vacaciones con una única cámara de lo más compacta que al final te va a servir para todo.

Conclusiones

La DJI Osmo 360 es una cámara excepcional para este verano. Una cámara, compacta y ligera, que te podrás llevar a cualquier lado para inmortalizar todo lo que pase durante tus vacaciones. Y lo mejor de todo es que podrás grabar a calidades de hasta 8K y sacar fotografías de hasta 120 megapíxeles. Lo que más nos ha gustado de la cámara ha sido su calidad de imagen, pero también su usabilidad. A pesar de que las cámaras 360 no son muy habituales, DJI nos ofrece todas las facilidades del mundo para que aprendamos a grabar con ella desde el primer momento.

¿Y qué es lo que menos nos ha gustado? La cámara brilla en prácticamente todos los apartados, pero creemos que tiene algunos aspectos por mejorar. En primer lugar, consideramos un error que el cristal de las lentes no sea reemplazable, lo que provoca que tengas que tener mucho cuidado para evitar cualquier posible rayadura. Por otro lado, consideramos que la memoria de 128 GB se queda algo corta teniendo en cuenta que es una cámara que graba hasta en 8K. A pesar de que podemos insertarle una Micro SD, creemos que podría tener más almacenamiento de base.

Pero, en líneas generales, nos parece una cámara perfecta para este verano que puede ser tuya a partir de 479,99 euros en su pack estándar. Entendemos que es bastante cara, pero también que es el precio a pagar por una auténtica dos en uno que te permite grabar todo lo que pasa a tu alrededor en calidades de hasta 8K.