¿Por qué la ONU no puede frenar la guerra en Gaza?: 147 de sus 193 Estados reconocen a Palestina, pero no hay avances

Madrid

La cifra de muertos este sábado en la Franja de Gaza se ha elevado a más de 60.400, según han informado las autoridades de la zona, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). Asimismo, la cifra de heridos ha alcanzado los 148.700 desde los ataques del 7 de octubre de 2023.

Unas cifras que demuestran la crudeza de la guerra en el enclave palestino y ante las que cabe preguntarse: ¿Qué está haciendo la comunidad internacional y la ONU al respecto? Por el momento, 147 de los 193 países que conforman la Organización de las Naciones Unidas han reconocido el Estado palestino, entre ellos España. También Francia, Reino Unido, Canadá y Malta han anunciado que tienen intención de sumarse a la lista; no obstante, pese a la posición de la mayoría de sus miembros, la ONU todavía no ha sido capaz de frenar el conflicto.

Por el contrario, Estados Unidos ya votó en contra de esta propuesta en el Consejo de Seguridad, órgano que cuenta con cinco miembros permanentes (EEUU, China, Rusia, Francia y Reino Unido), los cuales cuentan con derecho de veto.

Juanjo Álvarez, catedrático de derecho internacional privado en la Universidad del País Vasco, ha respondido ante los micrófonos de Matinal SER varias de las dudas sobre el papel de esta organización en la guerra.

¿Existe alguna manera de que Palestina fuera reconocida por la ONU sin la unanimidad del Consejo? ¿Podría cambiarse el sistema de votación?

"Para eliminar el derecho de veto, hace falta que ninguno de los cinco Estados que tienen derecho de veto se opongan al mismo", ha explicado el catedrático, ahondando en que se trata de una situación muy compleja dada la situación actual.

Así pues, se trata de un bucle sin final que difícilmente van a querer romper los líderes de estas cinco naciones, pues eso supondría perder un privilegio, aunque este "carezca de toda lógica en la gobernanza del concierto mundial".

"Aunque toda la totalidad, el resto de estados que integramos la comunidad internacional, estuviéramos de acuerdo en una nueva gobernanza para modificar el actual sistema (establecido hace 80 años en 1945) hace falta que ninguno de los cinco que tiene derecho de veto se oponga", ha remarcado.

Además, Álvarez incide en que si bien ciertos aspectos de la organización han ido avanzando hacia el "multilateralismo", la estructura base sobre la que se creó la ONU no ha cambiado. De hecho, aspectos como la resolución de conflictos bélicos, la justicia universal o la sostenibilidad, hacia los que avanza Naciones Unidas, requieren de un modelo de gobernanza actualizado.

"Fruto de todo ello, Naciones Unidas pierde autoridad en el concierto mundial. La gobernanza está sencillamente obsoleta y es inviable. No tiene lógica que la mayoría de la comunidad internacional sentados en la Asamblea General decida una cosa y eso sea papel mojado con tan solo el veto de un estado", ha defendido.

"Esto se traduce en que la ONU tiene un papel muy limitado a la hora de mediar en una guerra, a pesar de que es un organismo que se creó para mantener la paz y la seguridad internacional. Tiene una posición como organismo, pero no tiene capacidad de llevarla adelante", ha concluido.