Qué hay detrás del plan de Netanyahu para ocupar Gaza: "Sus socios extremistas buscan llevar a cabo una limpieza étnica total"

Este jueves el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha confirmado en una entrevista en Fox News que su intención es ocupar militarmente toda la Franja de Gaza. El presidente de Israel ha matizado que no tiene intención de gobernar el territorio, sino entregarlo a un "gobierno civil".

"No queremos conservarla, queremos tener un perímetro de seguridad. No queremos gobernarla, no queremos estar allí como un órgano de gobierno", ha indicado Netanyahu en la televisión estadounidense antes de mantener una reunión con su gabinete de seguridad, que incluye a varios de los ministros de su Ejecutivo y a gran parte de la cúpula militar, para abordar este asunto.

El mandatario israelí ha reiterado que los principales objetivos de su ofensiva en Gaza siguen siendo "la destrucción completa de Hamás y el retorno de todos los rehenes". De momento, la organización terrorista que gobierna la Franja mantiene retenidos a 50 israelíes. Hamás ha calificado los planes de Netanyahu de ocupar militarmente Gaza de "un golpe de Estado" a las negociaciones para un alto el fuego.

En estos últimos días, los principales medios del país filtraron que Netanyahu quiere proponer al gabinete de seguridad la expansión de la ofensiva, incluso a las zonas donde se cree que están los rehenes, y la ocupación total del enclave palestino. El Ejército israelí ha expresado sus dudas a la operación por su oposición a ocupar zonas en las que pueda haber rehenes israelíes vivos.

Pregunta: ¿Cómo de viables son los planes de Netanyahu de ocupar Gaza y ceder su Gobierno a un Ejecutivo civil?

Respuesta: Esto tiene un nombre. Es limpieza étnica. El gobierno de Israel ha llevado a cabo masacres y atrocidades que si la hubieran hecho otros gobiernos, la condena hubiera sido unánime, incluidas las democracias occidentales. EEUU y algunos países europeos dan un apoyo incondicional a Israel. Netanyahu quiere lavarse las manos. Lo está haciendo, pero no quiere ser responsable de ello. Su gobierno está lleno de ultraortodoxos ultranacionalistas mesiánicos.

Están planteando crear unos campos de concentración donde Israel decide quién puede entrar, les mantiene controlados con una acceso muy limitado de ayuda humanitaria. Todo lo que quede fuera serán zonas de aniquilación para disparar y matar a quien se muera.

Esto también tiene un nombre, es una solución final para Gaza. Para expulsar a la población, apoderarse en el territorio y crear una situación de guerra para mantenerse en el poder. Ese es su plan principal, junto a mantener la inmunidad evitando ir a la cárcel por los casos de corrupción y el fracaso del 7 de octubre.

P: ¿Hay algo que pueda frenarle? ¿Hay presión interna de familiares de rehenes o voces internas en Israel que puedan pararle los pies?

R: En Israel, las mentes más sensatas están viendo que es una calamidad para el modelo del estado y su imagen internacional. La mayoría de las poblaciones condenan lo que está haciendo Israel a nivel de opinión pública. Mirando la historia de las anteriores décadas, quienes imponen las condiciones monstruosas no cambian su comportamiento por sí solos, hace falta que haya un precio de pagar y eso solo viene del exterior.

Si esa presión se produce, si los israelíes se dan cuenta de que se van a convertir en un estado paria, en ese caso puede que haya un comportamiento en la opinión pública y la presión que reciban los dirigentes. Mientras perciban una impunidad casi total como la que han percibido durante casi 22 meses de EEUU o Alemania, la coalición de Netanyahu va a seguir haciendo lo que está haciendo: cometer un genocidio

P: ¿Si esto se llega a producir, qué puede suponer para la población civil de Gaza y para los secuestrados por Hamás? ¿Qué va a ocurrir en Palestina?

R: Según el plan que Netanyahu lleva prometiendo más de 600 días, liberar a todos los rehenes y acabar con Hamás. Que Netanyahu decida que los países árabes recojan los platos rotos y la destrucción masiva que ha provocado Israel en Gaza parece algo de ficción. No es una buena idea ante una opinión pública árabe que ven a diario monstruosidades y masacres con un impacto emocional enorme, con regímenes que no se atreven a decir nada porque son aliados de EEUU. Esto parece una locura más.

P: ¿Cómo de realista es pensar en que los rehenes israelíes vuelvan con vida a casa tras los planes de Netanyahu?

R: Es realista porque fuentes israelíes que tienen trato con Hamás y que han negociado en el pasado la liberación de rehenes vivos confirman una y otra vez que Hamás está dispuesto a liberar a todos los rehenes israelíes que quedan vivos y los cadáveres que tienen para parar la guerra y si se permite la entrada de ayuda humanitaria a gran escala en la Franja. Además, Hamás estaría dispuesto a retirarse del Gobierno de la Franja, en el que llevan desde 2007.

Quien no está interesado en absoluto en parar la guerra es Netanyahu. Le interesa que permanezca para mantener su puesto de primer ministro. Sus socios mesiánicos y extremistas buscan llevar a cabo el plan de limpieza étnica total. Expulsar a los dos millones de gazatíes a donde sea. Al Sinaí, Egipto, Somalia, donde sea. Para quedarse con el territorio y cumplir con la promesa divina, para quedarse con una tierra que consideran suya.

Trump habla de esa Riviera mediterránea con proyectos inmobiliarios en la costa de Gaza. Todo alimenta la locura que estamos viendo retransmitido en directo. Esto es un genocidio documentado casi en tiempo real. Mina el sistema internacional y unas normas mínimas básicas de humanidad y leyes de la guerra. Está destrozando organismos como la Unión Europea.