Se acercan las Perseidas: guía para ver la lluvia de estrellas más esperada del verano

Madrid

Cada verano, las Perseidas regresan puntuales a su cita con el cielo nocturno. Este año, el máximo de actividad se espera en la noche del 12 al 13 de agosto, aunque la Luna, aún muy iluminada tras su fase llena, podría dificultar la visibilidad de las estrellas fugaces más tenues.

Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN), aunque el pico será el martes, las Perseidas suelen presentar actividad en noches cercanas a esa fecha. Por eso, se recomienda observarlas también antes y después del máximo, especialmente en las horas previas a la salida de la Luna.

José María Madiedo, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), explica a EFE que "las Perseidas son la lluvia de estrellas más popular, dado que posee una alta actividad y tiene lugar en una época del año muy propicia para poder observarla: en periodo vacacional y con noches cálidas que invitan a estar al aire libre".

¿Cómo ver las estrellas?

Para disfrutar del espectáculo, lo ideal es buscar un lugar oscuro, alejado de las luces urbanas, y mirar al cielo con paciencia. En condiciones óptimas, podrían verse hasta 100 meteoros por hora, aunque este año lo más probable es que se observen unas 50, debido a la interferencia lunar.

Durante la noche del 12 al 13, las Perseidas comenzarán a aparecer cuando la constelación de Perseo se eleve sobre el horizonte, hacia medianoche. "Lo que implica que la cantidad de perseidas que veamos en el cielo irá aumentando conforme avance la madrugada", señala Madiedo.

El brillo de la Luna dificultará la observación

La Luna, que acaba de salir de su fase llena, estará al inicio de su fase menguante y aparecerá también sobre el horizonte en torno a la medianoche. Su brillo dificultará la observación de los meteoros más débiles, aunque las Perseidas se caracterizan por generar estrellas fugaces de gran luminosidad. "Esas harán que la observación merezca la pena", añade el investigador.

Para observarlas, no se necesita ningún instrumento especial. Basta con tumbarse, dejar que la vista se acostumbre a la oscuridad y mirar hacia las zonas más alejadas de la Luna. "Lo más cómodo es tumbarse y esperar a que la vista se acostumbre a la oscuridad", recomienda el IGN en su web.

Además de ser un espectáculo visual, las Perseidas pueden servir como puerta de entrada a la astronomía. "Es, en definitiva, un evento clásico de las noches de verano que se presta para hacer divulgación de algo tan fascinante como es la astronomía", afirma Madiedo.

El origen de la lluvia de estrellas

El origen de esta lluvia de estrellas está en el cometa 109P/Swift-Tuttle, que orbita alrededor del Sol cada 133 años. La Tierra cruza su órbita cada verano, entre el 17 de julio y el 24 de agosto. En ese trayecto, nuestro planeta se encuentra con partículas liberadas por el cometa en sus pasos anteriores. Al entrar en la atmósfera terrestre, estas partículas se calientan y se vaporizan, generando el destello que conocemos como estrella fugaz.

Algunas de estas partículas no se desintegran en la atmósfera terrestre, sino que impactan directamente contra la superficie de la Luna, formando pequeños cráteres, ya que nuestro satélite no tiene atmósfera que las frene.