¿Qué espera conseguir Trump y qué espera conseguir Putin de la reunión de este viernes en Alaska?
El republicano quiere ser recordado como el gran pacificador, mientras que el ruso busca desprenderse del calificativo de "criminal de guerra"

Vladímir Putin y Donald Trump durante un encuentro informal en Vietnam hace años / JORGE SILVA (Reuters)

Madrid
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente ruso, Vladimir Putin, se reunirán este viernes en Alaska en el marco de un encuentro programado para hablar del conflicto en Ucrania e intentar poner los primeros cimientos para buscar una paz duradera sobre el territorio que preside Volodímir Zelenski.
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El objetivo principal es conseguir negociar la paz para Ucrania, pero ambos líderes tienen su propia agenda: uno quiere ser reconocido como el gran pacificador y líder de occidente, candidato a Nobel de la Paz; el otro, para que se le reconozca como interlocutor internacionalmente y no como un criminal de guerra
Putin ya ha conseguido algo importante: el reconocimiento de Estados Unidos. El hecho de que se celebre esta reunión de alto nivel demuestra que los intentos occidentales de aislar al Kremlin han fracasado. Putin consigue dejar la acusación y orden de detención en su contra del Tribunal Internacional en papel mojado.
Pero Putin quiere más que símbolos: quiere conservar todo el territorio ocupado en las regiones ucranianas de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, y exige que Ucrania se retire de las zonas que aún controla. El Kremlin espera que, si Trump apoya sus demandas, Ucrania se quede sin respaldo estadounidense, lo que permitiría a Rusia y EEUU avanzar en sus relaciones bilaterales.
Sin embargo, la economía rusa está bajo presión, con un déficit creciente y menos ingresos por exportaciones de energía. Si estos problemas empujan a Putin a buscar el fin de la guerra, podría haber espacio para un compromiso, aunque por ahora no hay señales de ello.
Y... ¿qué quiere Trump?
Durante su campaña de 2024, Trump prometió que acabar con la guerra en Ucrania sería fácil. Desde su regreso a la Casa Blanca en enero, ha alternado entre frustración con Ucrania y Rusia. En febrero, reprendió a Zelenski en una reunión en la Casa Blanca y suspendió temporalmente la ayuda militar. Más recientemente, ha criticado a Putin por atacar civiles, aunque ha retrocedido en varias sanciones anunciadas.
Ahora, Trump recibe a Putin en suelo estadounidense y habla de "intercambio de tierras", lo que genera preocupación en Kiev por posibles concesiones territoriales. Esta semana, Trump ha intentado bajar las expectativas de la cumbre. El lunes dijo que sería una reunión para "sondear" y que sabría si puede llegar a un acuerdo "en los primeros dos minutos".
A pesar de sus declaraciones cambiantes, hay algo claro: Trump desea ser recordado como el pacificador que puso fin a la guerra. Incluso ha expresado su deseo de recibir el Premio Nobel de la Paz. Putin, hábil negociador, podría ofrecerle esa oportunidad, pero en los términos de Rusia.

Victoria García
En la SER, desde hace casi tres décadas, con algunas ausencias. Antes en Antena3 Radio y TV. Trabajé...




