La zona de España que tiene un "riesgo real" de sufrir un tsunami: "Hay estructuras que están activas"

Este verano, España no se vio afectada por el seísmo de magnitud 8,8 que sacudió la costa este de Rusia, en la Península de Kamchatka, convirtiéndose en uno de los más fuertes que han asolado al país a lo largo de su historia. El temblor también se sintió en zonas de Hawái, Japón y otras zonas de América Latina y Oceanía.

Pero eso no quiere decir que la Península Ibérica nunca se haya visto azotada por un terremoto de ese calibre. El 1 de noviembre de 1755, se produjo en Lisboa un terremoto de entre 8.7 y 9.0 de magnitud, conocido como el Gran Terremoto de Lisboa, que fue sucedido por un tsunami que arrasó la costa suroeste peninsular, especialmente la zona de Cádiz, Huelva y parte del Algarve.

España no es una zona que esté libre del peligro de este tipo de fenómenos naturales, por lo que el estudio de los fondos marinos y los sistemas de prevención de tsunami son tan importantes. Para hablar del peligro de sufrir un tsunami en nuestro país han contado con el investigador del Instituto de Ciencias Marinas del CSIC, Manel Prada.

El experto insiste en que, en España, existe un "riesgo real" de producirse un tsunami, particularmente en la zona sur. La Península Ibérica, explica, no está formada por un límite de placas tectónicas, como es el caso de Japón, que cuenta con una zona de subducción con una placa que pasa por encima de la otra. En nuestro caso, hay varias estructuras que, de alguna manera, están acomodando el contacto entre la placa africana y la placa euroasiática, por lo que, en estos momentos, están activas y colisionando.

De darse el fenómeno sería en la zona de la costa sur de la península, ya que estas estructuras se encuentran en el fondo del Mar de Alborán y la zona del golfo de Cádiz y pueden dar lugar a terremotos tsunamigénicos. Sin embargo, aclara Manel Prado, de producirse un tsunami, en ningún caso sería de la magnitud de los vividos en el Índico en 2004 o en Japón en 2011.

La predicción de cuándo ocurrirá

Manel Prada explica que los investigadores, más allá de predecir cuándo va a producirse el tsunami, pueden saber qué estructuras se encuentran "calladas" o "calmadas" en el sentido sísmico. "Sabemos que hay un límite de placa, sabemos que hay unas estructuras que están acomodando esa deformación y podemos caracterizar las estructuras que están acumulando energía. Todas esas estructuras que están acumulando energía, es decir, que no dan grandes terremotos, que no tienen actividad sísmica a pesar de que están, de alguna manera acomodando la compresión entre dos placas tectónicas, son estructuras que, en un futuro, pueden llegar a romper y generar un desplazamiento repentino del fondo oceánico."

Gracias a conocer la localización de estas estructuras, explica Prada, se puede realizar simulaciones de cómo se generaría ese tsunami y cómo podría penetrar en la costa. Esto permitiría elaborar planes de prevención y actuación, delimitando las zonas más vulnerables.