Pasó años escondido en su casa, cavó su propia tumba y sus sobrinos solo quisieron sacarlo para vender la finca
Emilio Silva, presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, ha compartido algunas de las situaciones más impactantes que ha vivido ejerciendo esta labor

Pasó años escondido en su casa, cavó su propia tumba y sus sobrinos solo quisieron sacarlo para vender la finca
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) lleva años ayudando a familias a descubrir dónde están enterrados algunos de sus familiares desaparecidos durante la Guerra Civil Española. Emilio Silva, presidente de la asociación, ha vivido muchas situaciones increíbles desde que sostiene ese cargo. Desde que consiguió llevar a cabo la primera exhumación científica en España tras encontrar los restos de su abuelo, Silva ha contribuido a que miles de personas puedan despedir a sus seres queridos.
A través de una red de historiadores, arqueólogos y colaboradores, ARMH lleva a cabo una investigación con la petición de los clientes, y tras la investigación, piden la autorización para llevar a cabo la exhumación, que no suele ser muy complicada: "El proceso es relativamente sencillo, se lo notificamos a la comunidad autónoma, al dueño del suelo, si es público o privado, y luego pedimos un permiso sanitario y en general no tenemos ningún problema", ha relatado Silva.
"También les estamos quitando un problema"
El presidente ha explicado que, a pesar de que los propietarios se pueden negar a llevar a cabo el proceso, en general no sucede porque "mucha gente o heredó ese suelo o ese suelo ya era de su familia, lo compró y, cuando alguien le ha contado que hay una fosa común dentro, nadie quiere tener eso en una finca".

Una situación parecida sucedió hace unos años, cuando exhumaron a un hombre del sótano de su casa: "Estuvo como un topo escondido durante años, cavó su propia tumba en un pueblo que se llama Torral de Merallio y cuando murió le enterraron dentro del sótano de la casa". Silva ha explicado que solo fue años después, a pesar de saber que su tío estaba enterrado ahí, cuando sus sobrinos avisaron a la asociación. Su decisión fue motivada por la inminente venta de la casa familiar. "Nos avisaron porque no querían meterle la casa a alguien, con un cuerpo de alguien que había estado años y años escondido", ha explicado; y añade: "También les estamos, entre comillas, quitando un problema".
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Vivir con la duda de dónde están tus familiares | Entrevista a Emilio Silva, presidente de la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica




