Putin, Xi y Kim Jong-Un escenificarán su unión frente a Occidente en un desfile en Pekín la próxima semana

Vladimir Putin intentó convertir el desfile militar de la Plaza Roja de este año en una imagen de fuerza y apoyos internacionales frente a sus enemigos occidentales, pero va a ser el mandatario chino Xi Jinping quien consiga el mensaje más potente con el desfile por el final de la II Guerra Mundial en el Pacífico que se celebra en Pekín el próximo 3 de septiembre.

Y es que Xi Jinping no sólo estará acompañado por su homólogo ruso, sino que también el dictador norcoreano Kim Jong-Un acudirá a Pekín, lo que no hizo en el caso de Moscú. El dirigente norcoreano lleva seis años sin ir a China y será la primera vez en décadas que el líder de ese país acude a un desfile militar de la principal potencia asiática.

Los tres van a escenificar de este modo su alianza política, que también lo es militar, cuando siguen sin fructificar las negociaciones para un alto el fuego en Ucrania. De hecho, Putin acude en mitad del calendario previsto por Trump para que dé un paso hacia la paz.

Los presidentes de Rusia y Corea del Norte no serán los únicos que estarán en Pekín, donde se espera también la presencia de los máximos mandatarios de Irán, Pakistán, Bielorrusia o Cuba. Habrá también fotografía de los presidentes de Armenia y Azerbaiyán después de firmar recientemente la paz y también acudirán varios presidentes de países del sudeste asiático, zona donde China está haciendo crecer su influencia.

También habrá europeos

Como sucedió en el caso del desfile de Moscú, dos de los presidentes prorrusos europeos estarán presentes en Pekín. Uno de ellos representa además a un país miembro de la Unión Europea, como es el eslovaco Robert Fico. El otro es el serbio Aleksandar Vucic.

Xi Jinping pronunciará un discurso después del desfile en el que China mostrará su armamento más moderno que incluirá aviones, tanques y sistemas anti-drones que pasarán por la plaza de Tiananmén.