La operación retorno, marcada por el mal estado de las carreteras: se necesitan cerca de 14.000 millones de euros para ponerlas a punto

Madrid

Las carreteras españolas atraviesan un momento crítico. Prácticamente la mitad de la red viaria presenta daños graves, con baches, grietas profundas y firme deteriorado. Según la Asociación Española de la Carretera, se necesitaría una inversión cercana a los 14.000 millones de euros para devolverlas a un estado óptimo. Esta situación no solo compromete la seguridad de los conductores, sino que también incrementa el consumo de combustible y el riesgo de accidentes.

Desde las asociaciones de víctimas, como Stop Accidentes, se reclama con urgencia una mejora en las infraestructuras. La periodista de la Cadena SER, María Manjavacas, ha hablado con Fernando Muñoz, portavoz nacional de la organización, quien ha enfatizado que "las infraestructuras deben ser seguras, tanto en la calzada como en los alrededores, para que aunque yo como humano me equivoque, no me mate". Los guardarraíles, conocidos como "quitamiedos", están implicados en alrededor del 15 % de las muertes de motoristas y aunque no evitan el accidente, sí podrían evitar la muerte.

Una previsión de más de 100 millones de desplazamientos este verano

Este verano, la Dirección General de Tráfico preveía más de 100 millones de desplazamientos de largo recorrido, una cifra récord que ha obligado a desplegar cinco grandes operativos: la operación salida de julio, la operación Santiago, la del 1 de agosto, la del 15 de agosto y la operación retorno de finales de mes. Durante esta última, se han registrado más de cinco millones de desplazamientos.

La DGT ha movilizado todos sus recursos: agentes de tráfico, helicópteros Pegasus, drones, cámaras, furgonetas camufladas y carriles adicionales en las vías más congestionadas. También se han suspendido obras y restringido el tráfico de camiones en los tramos más conflictivos. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha subrayado que la seguridad vial es un "proyecto de país" y ha pedido prudencia a los ciudadanos: "No es razonable arriesgar la vida por disfrutar una copa más o por llegar cinco minutos antes".

A pesar de los esfuerzos, más de 600 personas han perdido la vida en las carreteras españolas en lo que va de año, sin contar los datos finales de esta operación retorno. La cifra se mantiene estable respecto a años anteriores, pero sigue siendo inasumible para las autoridades y asociaciones de víctimas.

La DGT ha identificado factores clave en la siniestralidad: distracciones al volante, salidas de vía, alcohol y drogas, y un alto número de motoristas fallecidos, que representan el 25 % de las víctimas mortales pese a ser solo el 3 % del tráfico. La radiografía de las carreteras españolas es preocupante, y el verano de 2025 ha vuelto a poner sobre la mesa la urgencia de invertir en seguridad vial, señalización y mantenimiento para evitar que los desplazamientos se conviertan en tragedias.