Mike Tyson confiesa su mala experiencia con el fentanilo: "Solía usarlo para curarme un dedo del pie"

La relación de Mike Tyson con las drogas ha venido tocando de lleno a una de las mayores leyendas que ha dado el boxeo. Si bien fue después de su retiro cuando estos problemas afloraron más que nunca, llevando al expúgil a confesar las adicciones que venían mermándole y a buscar soluciones, su contacto con estas sustancias se ha retrotraído hasta años atrás. Su última confesión ha sorprendido al mundo, relatando al mundo su experiencia con el fentanilo cuando todavía era un gran desconocido para la sociedad.

Antes de que el fentanilo se convirtiese en una de las mayores crisis de salud en Estados Unidos, cobrándose diariamente la vida de cientos de sus compatriotas por sobredosis, Tyson reconoce que tuvo una toma de contacto con el fentanilo. La sustancia era capaz de aliviar un problema en el pie, pero le trajo otras consecuencias incompatibles con el rendimiento al máximo nivel.

"Era un analgésico y solía usarlo para curarme el dedo del pie", aseguró en una entrevista como invitado de lujo a The Katie Miller Podcast. Sin embargo, Tyson puso por delante que la sustancia "era como la heroína": "Una vez que pasa el efecto y te quitas la cura, empiezas a sentir síntomas de abstinencia, a vomitar... Como si estuvieras tomando heroína", detalló.

Fue entonces cuando Mike Tyson fue alertado de los riesgos por parte del amigo que le presentó el fentanilo. "Era ilegal si entraba en mi sangre. 'Era un narcótico', me dijo. Era nuevo", expresó, a sabiendas de que por entonces "nadie lo conocía". Su duda, incluso, pasaba por si podría usarlo en competiciones, idea que tuvo que desechar tras esta toma de contacto.