La Inteligencia Artificial aumenta la tasa de casos de acoso escolar
Los acosadores utilizan la IA en el 14% de episodios, sobre todo para manipular videos o fotos que después difunden en redes sociales

Acoso escolar / Juan Algar

El acoso escolar sigue traspasando las fronteras del centro educativo. La irrupción de la IA y las facilidades en el acceso a esta herramienta han disparado los casos de ciberbullying. Según el estudio de la Fundación ANAR y la Fundación Mutua Madrileña, en el que han participado cerca de 9.000 menores, el 12,3% de los alumnos afirma que él o uno de sus compañeros está sufriendo acoso escolar (presencial, ciberbullying o ambos) El crecimiento es de un 3% con respecto al año pasado. El 6,5% de los alumnos conoce un caso de acoso escolar presencial en su aula y el 2,2% afirma saber de la existencia de casos de ciberbullying en su clase. Un 3,6% adicional afirma que las víctimas lo sufren de ambas formas. Ambas tasas duplican las del curso anterior.
La Inteligencia Artificial ha supuesto un plus para los acosadores que en el 54% de los casos la utilizan para manipular videos o fotos. "Utilizan la IA básicamente para hacer videos a partir de una imagen o de la voz de una persona de la que se quieren reír", explica Jordi Domínguez de la Fundación ANAR. "También vemos que un tercio de ellos utilizan esta herramienta para la suplantación de la identidad y un 13% hacen memes o roban datos", asegura. Esos videos se difunden después en redes sociales, Whatsapp, Instagram y Tik Tok, principalmente, aunque en primaria se ejerce sobre todo a través de videojuegos y juegos online. "Esto significa que incluso en la intimidad de su casa, cuando terminan el colegio y se están relajando, están recibiendo esa tortura psicológica de que haya terceros que se están metiendo con ellos o les están haciendo daño", concluye Domínguez.
El acoso presencial, cada vez más violento
Según este estudio, casi un tercio de los alumnos percibe que la situación de acoso presencial dura más de 1 año (un aumento de un 1,6% con respecto al curso anterior) Los insultos, motes y burlas (84,8%), seguidos por el aislamiento (44,8%) son los tipos de agresión más frecuentes. Aumenta con respecto al año anterior el aislamiento, así como la difusión de rumores, los golpes y patadas; las amenazas y el robo o rotura de objetos. Especialmente crece en 8,7 puntos porcentuales los golpes y patadas entre los escolares.
Con respecto a los acosadores, el patrón prácticamente se mantiene al de años atrás: chicos más que chicas y que acosan en grupo. Se meten con la víctima por cosas que hace o dice (60,1%), el aspecto físico (54,9%) o porque tiene problemas personales (psicológicos, discapacidad, de lenguaje, etc.), en un 27,1% de los casos. Llama la atención la alta proporción de alumnos, un 48%, que no actúan cuando tienen conocimiento de un caso de acoso escolar.




