"Estoy encerrado, no puedo salir": un hombre logra liberarse de su secuestrador lanzando servilletas por una ventana
El presunto secuestrador, ahora en prisión provisional, había ofrecido a la víctima vivir en su casa después de que este se quedase en la calle
Un agente de la Policía Nacional, en una imagen de archivo. / J. Cruces
Madrid
La Policía Nacional ha logrado liberar a un hombre secuestrado en una vivienda en Puente de Vallecas, en Madrid, después de que este pidiese auxilio arrojando servilletas por la ventana de la casa en la que estaba retenido.
Todo comenzó el pasado 11 de septiembre, cuando una vecina llamó al 091 después de haber recibido durante varios días las servilletas con los mensajes de auxilio, según ha adelantado el diario ABC.
Una de las servilletas, a las que ha tenido acceso 'El País', en las que el secuestrado en Vallecas pedía auxilio.
Una de las servilletas, a las que ha tenido acceso 'El País', en las que el secuestrado en Vallecas pedía auxilio.
Unos mensajes en los que el secuestrado aseguraba que la persona que le mantenía retenida era "violenta" y poseía "armas en casa". "Necesito ayuda urgente. Estoy encerrado, no puedo salir. Llamar a Policía 112. Estoy secuestrado", se podía leer en otra.
Los agentes acudieron entonces a la zona del domicilio, desde donde pudieron hablar con el secuestrado a través de la ventana, quien confirmó su situación. Posteriormente, los bomberos abrieron la puerta de la vivienda y procedieron a la liberación del hombre, que fue trasladado a un hospital para ser tratado de lesiones, como hematomas.
Más tarde, cuando el secuestrador regresó al domicilio, los agentes lo detuvieron como presunto responsable de delitos de detención ilegal, lesiones, torturas y tenencia ilícita de armas.
La relación entre ambos
El secuestrador y la víctima eran amigos desde hace tiempo, tal y como han informado fuentes cercanas a la investigación a EFE. El hombre retenido se encontraba viviendo en la calle tras haber perdido gran parte del dinero obtenido como administrador de una empresa en Portugal.
Fue en ese momento cuando el presunto secuestrador, ahora en prisión provisional, le ofreció vivir en su piso. Cuando este aceptó y empezaron a convivir, el ahora detenido le dijo que quería el dinero que iba a recibir como contraprestación de residir con él.
El presunto secuestrador, con experiencia en tratos fraudulentos, quería los ingresos de su amigo y por eso le encerró, le golpeó y le llegó a amenazar de muerte, según han indicado a EFE fuentes de la investigación.
