Crisis energética y alimentaria en Cuba: apagones, escasez y calles llenas de basura
Los cortes intermitentes del suministro eléctrico, la falta de agua potable en varios municipios, las inundaciones en La Habana y el recorte en la cartilla de racionamiento han colocado a la sociedad civil cubana en uno de los mayores estados de necesidad y crisis de los últimos años
Crisis energética y alimentaria en Cuba: apagones, escasez y calles llenas de basura
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Madrid
Cinco colapsos electricos masivos en un año, el último esta misma semana Cuba se encuentra al borde del colapso energético. En muchas zonas del país, los ciudadanos pasan más tiempo sin suministro eléctrico que con él. Casi el 60 % del territorio se ha quedado a oscuras. Según el ingeniero nuclear Pelayo Calante, “el problema es el estado de deterioro de las centrales eléctricas, que no se modernizan ni se pueden cambiar porque el régimen no paga a las compañías que pueden suministrar las piezas de recambio”.
Ante esta situación, el Gobierno ha anunciado un nuevo proyecto para establecer el suministro eléctrico mediante placas solares. La iniciativa tiene potencial, ya que Cuba cuenta con muchas horas de sol al año. Sin embargo, como advierte Calante, “las placas solares funcionan como apoyo y refuerzo del sistema energético de las centrales, pero por sí solas no pueden cubrir las necesidades de la población”.
La infraestructura eléctrica está obsoleta
A pesar de las declaraciones oficiales que aseguran que los circuitos están operativos, la realidad es que la infraestructura eléctrica está obsoleta. Y a la falta de electricidad se suma otro problema grave: esta semana, seis provincias se han quedado sin suministro de agua potable. En algunas zonas de La Habana, las fuertes inundaciones han inutilizado el servicio.
La situación social es crítica. La cartilla de racionamiento vuelve a estar menguada y, según testimonios locales, el pollo ha desaparecido del reparto en las últimas semanas. Muchos cubanos dependen de la ayuda de familiares en el extranjero para completar la cesta básica, pero existe una amplia bolsa de población que, a la pobreza energética, suma ahora la alimentaria.
Las calles de las principales ciudades, incluida La Habana, están llenas de basura acumulada que no se recoge. La falta de energía impide el funcionamiento de trituradoras y depuradoras, lo que agrava aún más el estado de insalubridad que ya sufre la población.
Victoria García
En la SER, desde hace casi tres décadas, con algunas ausencias. Antes en Antena3 Radio y TV. Trabajé...
