Los expertos alertan de que el embargo total de armas a Israel mermará la capacidad de las Fuerzas Armadas

Madrid

Con la máxima discreción, el Ministerio de Defensa sigue trabajando con la industria militar española para mitigar el impacto que ya está provocando la desconexión militar de Israel que ha puesto en marcha el Gobierno de España, a raíz del genocidio sobre el pueblo palestino.

El efecto será aún mayor con el nuevo Real Decreto que aprobará este martes el Consejo de Ministros para aplicar un embargo total al armamento israelí.

Ese veto al material de defensa israelí provocará una merma en las capacidades de las Fuerzas Armadas españolas, según coinciden todos los expertos y analistas consultados por la SER, que anticipan un "impacto negativo" como alerta, por ejemplo, el profesor de Economía de la Defensa de la Universidad Complutense Antonio Fonfría que teme "un problema por un agujero de seguridad".

A su juicio, España prescindirá de "sistemas muy eficaces, muy disuasorios" que "otros países sí van a tener".

Coincide en ese temor el director de defensa y seguridad de Atrevia, Francisco José Girao, quien no tiene ninguna duda de que desconectarse militarmente de Israel tendrá consecuencias porque "no es sencillo desconectarse de la noche a la mañana".

Por un lado, se trata de sistemas que "han sido validados por las Fuerzas Armadas, que han hecho sus pruebas para dar el ok y que ahora van a tener que ser reiniciadas", y, por otro, son tecnologías que "no tienen sustituto o que tienen muy poco sustitutos", añade.

Es el caso de los misiles SPIKE LR2. El Ejército de Tierra ya utiliza una versión antigua de estos misiles que Israel está lanzando en Gaza para completar su masacre sobre el pueblo palestino.

El Gobierno ha cancelado ya la compra de la versión más moderna, el SPIKE LR2. Una posible alternativa son los Javelin de EEUU, pero esa opción es escasa y más cara.

"Por supuesto, habrá un sobrecoste económico. Primero porque la demanda de Javelins es muy elevada, Ucrania los ha estado utilizando, por otro lado, nuestra relación como país con Estados Unidos no pasa por su mejor momento, lo más probable es que nos digan que si queremos estos misiles pongamos a la cola, no va a haber un trato de favor, a lo mejor los recibimos dentro de dos años", apunta el Doctor por la Universidad Complutense de Madrid.

Defensa niega una merma en las capacidades

Ese análisis difiere de la lectura que hacen desde el Ministerio de Defensa. La secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, niega que "alguna capacidad de las Fuerzas Armadas se vea afectada por la desconexión militar israelí".

La sustitución a los misiles SPIKE "ya está en marcha", según ha adelantado la secretaria de Estado en la Comisión de Defensa, pero no ha entrado en detalles sobre plazos o precios, pese a la insistencia de los diputados del Partido Popular. Valcarce tan solo ha deslizado la idea de que ese proyecto alternativo pasaría por la "europeización" de un sistema nacional que "proporcione las necesidades operativas requeridas", es decir, la secretaria de Estado de Defensa estaría cerrando las puertas a la opción estadounidense del Javelin.

Amparo Valcarce asegura que Ejército de Tierra ya tiene "una importante cantidad de misiles SPIKE LR-de la versión antigua", sin concretar, por tanto, la protección del sistema anticarros está "garantizada" y "poner en duda las capacidades de las Fuerzas Armadas no solo es ignorancia, es muy grave porque ni esperamos retrasos, ni esperamos sobrecostes", ha zanjado la secretaria de Estado de Defensa.

"Impacto negativo para la capacidad operativa"

Otro ejemplo es la anulación del contrato adjudicado a la empresa israelí Rafael Advanced Defense System LTD, con sede en la ciudad de Haifa, por un valor de 207.414.102 euros, para equipar a los nuevos cazas Eurofighter españoles con un moderno sistema de guiado láser para mejorar su precisión en el combate aéreo.

Como recuerda el teniente general retirado, Juan Antonio del Castillo, vocal de la Asociación Atlántica Española hay "11 países europeos que lo tienen equipado" y España lamentará quedarse fuera: "Nos desgajaríamos como industria nacional, nos separaríamos no solo de Israel sino de todos los otros países que son miembros de programas conjuntos".

Sería, por tanto, "francamente negativo para nuestra capacidad operativa durante bastante tiempo y sobre todo para nuestra integración en el grupo estratégico al que pertenecemos".

Al menos, a nivel de inteligencia la relación entre España e Israel no se ha roto, sigue intacta, según ha comprobado la Cadena SER, igual que ocurre con el intercambio de información en la lucha antiterrorista.