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Ragasa, el rey de los tifones, llega a China: órdenes de desalojo hasta en 10 ciudades y ríos a reventar

El superhuracán ha pasado por Hong Kong, Taiwán y las Filipinas dejando un reguero de destrucción e inundaciones que han desalojado hasta 10 ciudades chinas

Vista de una de las carreteras afectadas por el tifón Ragasa a su paso por Taiwán / RITCHIE B. TONGO (EFE)

Madrid

Negocios cerrados, pueblos enteros evacuados, y temor por el supertifón, el decimoctavo del año, pero el más agresivo, que ha llegado a Guangdong, al sur de China. Fuertes lluvias torrenciales en las provincias del sur y grandes crecidas en los ríos, que han elevado el nivel de alerta por donde navegan.

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El poderoso tifón Ragasa considerado uno de los más fuertes en años, azotó este miércoles la costa sur de China después de sembrar caos y muerte en Taiwán y Filipinas. Con ráfagas que alcanzaron los 241 km/h el fenómeno natural paralizó ciudades enteras y obligó a evacuar a casi 1,9 millones de personas en Guangdong, la provincia más industrializada del país.

En la isla de Hailing, donde el ciclón tocó tierra con vientos sostenidos de 144 km/h, las autoridades dispusieron el cierre de fábricas, escuelas y el transporte en al menos una docena de urbes. En Chuandao se registraron ráfagas récord, mientras que en Zhuhai y Yangjiang las olas destruyeron malecones e infraestructuras costeras. Un lago en la costa este de Taiwán se ha desbordado al paso del tifón y ha arrastrado uno de los principales puentes que une la isla.

Los coches han sido arrastrados por el agua del río Perla en Guandgdong, en la costa de la isla Gaolan. Las autoridades chinas han advertido que Ragasa seguirá causando lluvias torrenciales y marejadas en las próximas horas, por lo que instaron a la población a mantenerse bajo resguardo.

Mientras tanto, la magnitud de los daños comienza a dimensionarse en toda la región, que enfrenta ahora el desafío de la recuperación tras el paso del devastador ciclón. El hotel Ocean Park, en el centro de Hong Kong, ha sido arrasado por las aguas.

Victoria García

En la SER, desde hace casi tres décadas, con...