De los Alpes a Roma en bicicleta: el apasionante viaje literario de Pepe Pérez-Muelas

Pepe Pérez-Muelas (Lorca, 1989) odia las esperas, le resultan un tiempo perdido. No sabe qué hacer en los minutos previos a una entrevista, en la presentación de un libro o en el preciso instante antes de entrar en una clase para impartir la lección. El filólogo, historiador del arte y profesor de Literatura lo confiesa en su nuevo libro, Días de sol y piedra: De los Alpes a Roma (Siruela, 2025). Quizá sea fruto de la ansiedad, un dolor que le llevó mucho tiempo diagnosticar, que se extendió por todo su cuerpo hasta paralizarlo y sumirlo en una espiral de pesimismo. El gran problema de salud mental de nuestras sociedades contemporáneas, que él pensó que era cosa de otros, que nunca le pasaría a él, que era joven e inmortal.

El escritor tenía miedo al vacío, a la muerte, al silencio. Un día un amigo le habló de la bicicleta, e la perspectiva nueva que le otorga al paisaje, del ritmo del corazón cuando subes una cuesta. Empezó a hacer rutas y descubrió que la bicicleta relajaba bastante, que permitía, con muy poco esfuerzo, salir de la ciudad y estar en comunicación con el paisaje, con la naturaleza, descubrir un mundo que tenemos cerca, pero que nos resulta demasiado lejano, casi intocable. "Lo que antes eran pensamientos oscuros, bastante monótonos y negativos, de repente se tornaban en un paisaje nuevo que quería descubrir o un nuevo puerto de montaña al que anhelaba ascender. Poco a poco la relación con la bicicleta se hizo necesaria. La bicicleta me salvó, esto suena a eslogan, pero es cierto, me salvó. La bicicleta es el origen de este ascenso hacia la curación".

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Días de sol y piedra es un viaje en bicicleta por la vía Francígena, un viaje físico, con Italia como telón de fondo, como escenario y contexto literario. Pero, sobre todo, es un viaje interior. "Un viaje a través de los miedos que siento desde la infancia, a través de la ansiedad que llevaba sufriendo unos años, incluso bordeando un poco el precipicio de la depresión. Un viaje que intenta salir de ese laberinto en el que yo mismo me metí y que explico en el libro. Un viaje hacia la luz y la luz, para mí, desde siempre, desde la infancia, ha sido Roma. Para mí, Roma es una especie de patria sentimental, es algo muy ligado a la infancia y lo que está ligado a la infancia no se olvida y se mitifica", dice.

"Atravesar Italia en bicicleta exige una especie de reinterpretación del mundo clásico", escribe. Y es lo que Pepe Pérez-Muelas hace a lo largo del recorrido, desde el mundo clásico al contemporáneo. Cesare Pavese, Primo Levi, Petrarca, Verdi, Bertolucci, Fellini, Pasolini, Chirico o William Turner. Es abrumadora, en el sentido de asombrosa y admirable, la cantidad de historias, autores, artistas y textos que recoge y de los que hemos hablado. Cada capítulo del libro tiene un hilo conductor, un artista, un escritor o incluso personajes literarios, como Nausícaa y Penélope, de La Odisea, y con las que se encontró durante el trayecto. "Entiendo que pueda resultar inverosímil, que soy un escritor completamente enamorado de Homero y he pervertido la realidad. Pero no, existió Penélope, estuve hablando con ella, era una peregrina inglesa que llegaba a Pavía. Y existió Nausícaa, me la encontré muy cerca de San Gimignano una noche, estuvimos hablando, de la misma forma que Ulises se quedó hablando con Nausícaa en la playa", explica.

De Ulises y La Odisea a El Quijote, un libro "superior que llevo pegado a la piel", dice. "Mis días son relecturas de este hidalgo y, como profesor de Literatura, también así se lo intento hacer ver a mis alumnos". Adolescentes que ya no tienen a científicos o escritores como referentes, lamenta Pérez-Muelas. Como Aquiles, los jóvenes buscan el minuto de gloria en un reel de Instagram, "la fama sin ningún tipo de inteligencia detrás, sin ningún esfuerzo, lo artificioso sin que haya rastro de esencia". Algo en lo que él mismo ha caído muchas veces, reconoce.

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Al escritor y profesor le hemos preguntado para qué sirven los llamados estudios clásicos, si los fragmentos que nos quedan no entran a formar parte de nuestra efímera vida, tampoco de la educativa. "Tal vez el mayor símbolo de la debacle que tenemos encima es la falta de tiempo y de comprensión lectora, y esto no es cosa solo de adolescentes. Las redes sociales son una perdición y afecta también a los medios de comunicación, ya no leemos el cuerpo de una noticia, solo los titulares", advierte.

Así que os invitamos, a los que nos estáis leyendo y podáis, a escuchar la conversación que hemos tenido con él. Sobre Italia, las guerras y el fascismo. Sobre la muerte y los muertos, por qué nos importan más los de hoy que los de ayer. Sobre la fe y la religión, algunas de las obsesiones de Pepe Pérez-Muelas que ha recogido en este libro apasionante, que nos ha hecho subir una montaña de conocimiento, pedalada a pedalada.