Atentos a Japón

Madrid

Hubo una época cercana en la que Japón aparecía en todos los análisis de la geopolítica mundial. Fue entre las décadas de los ochenta y noventa del siglo pasado, cuando el archipiélago asiático conoció un crecimiento económico espectacular. El llamado “milagro japonés”. Entonces se decía que los japoneses lo compraban todo.

Luego cambió aquello, se torció el rumbo y Japón entró en una crisis interminable.

Ahora se habla de Japón mucho más para vincular al país a una burbuja turística que para desarrollar análisis geopolíticos. En la primera división aparecen solitarios Estados Unidos, China y Rusia.

Y sin embargo, Japón se está transformando. Hay muchas posibilidades de que en unos días tenga de jefa de Gobierno a una mujer, admiradora de Margaret Thatcher, conservadora y ultranacionalista. Sanae Takaichi no ha destacado por el momento por su defensa del feminismo ni de los derechos de las minorías, pero será bien vista por la Administración Trump dada su intención de aumentar exponencialmente el gasto militar en productos americanos.

En esas transformaciones habrá que incluir también la aparición de formaciones de extrema derecha, con tirón sobre todo entre los jóvenes nipones desencantados de la política tradicional y con problemas fundamentales de acceso a la vivienda.

Atentos pues a mirar también hacia Japón.