Bruselas pide a los estados la prohibición de las terapias de conversión: una de cada cuatro personas LGTBIQ+ las ha sufrido a lo largo de su vida

Bruselas

Una de cada cuatro personas LGTBI+ ha sido sometida a algún tipo de terapia de conversión a lo largo de su vida. Un porcentaje que se eleva al 55% cuando hablamos de las personas trans. Bruselas alerta de la permanencia de este tipo de terapias, así como de prácticas de discriminación a pesar de que el respeto y la tolerancia al colectivo ha aumentado en los últimos cinco años en toda la Unión Europea según se refleja en los últimos eurobarómetros. Por eso la Comisión sitúa la prohibición de las terapias y la aprobación de planes nacionales de igualdad en nueva la estrategia LGTBIQ+ 2026-2030 que la comisaria de Igualdad, Hadja Lahbib ha presentado este miércoles en Estrasburgo.

Solo ocho países europeos prohíben las terapias de conversión

Aunque de momento Bruselas se limita a instar, puesto que la propuesta de la Comisión no es vinculante, las llamadas terapias de conversión están prohibidas ya en ocho países, entre ellos España. Por eso la Comisión pide al resto extender esa prohibición, aunque de momento la propuesta no obliga a las capitales. El ejecutivo comunitario hace suya la iniciativa ciudadana presentada en enero de 2024 que pedía la prohibición de estas prácticas, definidas como "intervenciones destinadas a cambiar, reprimir o suprimir la orientación sexual, la identidad de género o la expresión de género de las personas LGTBIQ+".

"Un atentado contra la dignidad de las personas"

Para la comisaria de Igualdad “estas prácticas de conversión no son terapia. Hacen daño. Pueden causar graves daños físicos y mentales y son un atentado contra la dignidad de la persona”. Lahbib ha anunciado que la Comisión evaluará la “naturaleza, prevalencia e impacto” de este tipo de terapias para proponer medidas a las capitales destinadas a su prohibición. Es una de las medidas de este plan que recoge también la petición para que los países aprueben planes de igualdad para el colectivo, como ya hacen 13 estados, entre ellos España. En la Unión Europea, el 37% de las personas LGTBI ha sufrido algún tipo de discriminación en el último año, un porcentaje que se eleva al 67% para las personas trans.