Qué fue de... Petrov, la 'bala' búlgara que no logró disparar al Atlético en los difíciles años 2000

Martin Petrov (Vratsa, Bulgaria, 1979) fue un velocista del fútbol que se abrió paso en la historia del fútbol desde la banda izquierda. Uno de los mayores talentos de los que ha disfrutado la afición búlgara en lo que va de siglo, llegó a compartir vestuario con estrellas de la talla de Dimitar Berbatov e incluso Hristo Stoichkov. Hizo las maletas muy joven en busca de un hueco entre los grandes de Europa y llegó a España de la mano de un Atlético de Madrid dispuesto a crecer en una década con un arranque para olvidar.

Cuando todavía no se contemplaban los extremos a pierna cambiada en el fútbol de élite, Petrov hizo gala de una zurda privilegiada. Cabalgando con mucho veneno la banda izquierda, el fútbol búlgaro se quedó pequeño muy pronto para sus ambiciones. Y aunque recaló en unos de los clubes más grandes de su país, el CSKA de Sofía, con sólo 17 años, lució un carisma especial que le llevó a emprender una aventura internacional lejos de casa muy joven.

Llamado a convertirse en uno de los nuevos cracks del fútbol búlgaro durante la década de los 90, en Suiza gozó de su primera experiencia fuera de Bulgaria. Dos años en el Servette sirvieron de trampolín hacia la Bundesliga alemana, donde el Wolfsburgo se hizo con sus servicios y le permitió brillar ya en una competición de renombre. Allí, en uno de los grandes del fútbol alemán, se convirtió en el genio y figura que acaparó un buen número de 'novias' en Europa para hacerse con sus servicios.

Cuatro años habían disfrutado ya los alemanes de la zurda de Petrov cuando el Atlético se rascó el bolsillo por él. Añoraban los colchoneros recuperar el terreno perdido a comienzos de siglo, incluso después de sufrir un inédito paso por la Segunda División, y en su nuevo proyecto buscaron reunir figuras capaces de hacer soñar con cotas altas. Nada más y nada menos que 7 millones de euros de la época (2005) desembolsaron los rojiblancos en su fichaje, buscando con ansias dejar atrás la intrascendencia de temporadas en la zona media de la clasificación mirando hacia arriba.

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Apuesta millonaria de un Atleti estancado

Era ya Petrov estrella en la selección búlgara cuando aterrizó en Madrid, convirtiéndose en una apuesta de relumbrón enfocada a dar alas a un equipo con alta competencia en la zona. Asumía el nuevo fichaje el reto de presentar competencia a jugadores de la talla de Luciano Galletti o Maxi Rodríguez, pero acabó haciéndose con la titularidad en su primer año. Eso sí, Petrov alternó detallazos de superclase con su zurda pegada a la banda izquierda y varios partidos desapercibido que dieron constancia de su gran problema de irregularidad.

El propio Atleti se vio sumido aquel curso en otro 'quiero y no puedo' que se llevó por delante el puesto de Carlos Bianchi en el banquillo. Y para colmo, el sueño de Petrov de triunfar de rojiblanco sufrió un revés colosal en su segundo curso en el Vicente Calderón. El búlgaro llevó su cuerpo al límite y su rodilla dijo 'basta' en un mes de octubre que haría saltar por los aires su carrera. Una rotura de cruzado le noqueó durante casi todo el resto del curso, obligándole a pasarse en el dique seco hasta las últimas jornadas. Tras eso, acabó saliendo por la puerta de atrás rumbo a un Manchester City todavía sin el sustento de los petrodólares del Abu Dhabi United Group.

Y aunque volvió a sentirse importante en la Premier League, donde dejó olvidada la lesión más grave de su carrera, Petrov nunca llegó a explotar entre los más grandes de Europa. Por aquel entonces también los 'citizens' vagaban por mitad de tabla en la liga inglesa y manteniendo esta tónica previa a la llegada de los famosos 'petrodólares' pese a que el búlgaro fue uno de los hombres importantes del equipo durante tres cursos. Su final de etapa se dio ya como todo un veterano, aunque siguió dejando muestras de su calidad en las grandes ligas.

Todavía en las islas británicas continuó cabalgando por la banda izquierda como jugador de un Bolton Wanderers que inició entonces su caída libre. Llegó a jugar un año en Championship justo antes de probar fortuna en una corta experiencia de vuelta en España de la mano del RCD Espanyol, con quien participó a cuentagotas durante la temporada 2012/13. Parecía que ésta sería su última aventura al más alto nivel después de quedar libre en Barcelona y pasar por varios meses de inactividad. Sin embargo, en 'su casa' tuvo una despedida, cuanto menos, emotiva. Tuvo la oportunidad de enfudarse la camiseta del CSKA de Sofía por una última temporada antes de despedirse del fútbol a los 35 años.

¿Qué hace ahora?

Pocos futbolistas han sido capaces de mantener la forma tan bien como Petrov años después de su retirada. Mucho menos cuando ha pasado ya más de una década de su último partido como profesional. Su despedida de los campos tuvo lugar regresando a sus orígenes, dándose un último baño de masas en Bulgaria antes de focalizarse en una vida mucho más familiar.

Aun así, su vínculo con España sigue muy vivo. Años después de haber dejado su sello en el Vicente Calderón, el ya exfutbolista búlgaro se convirtió en un seguidor más del Atlético de Madrid in situ. Un asiduo a los partidos del Metropolitano desde el cambio de estadio, Petrov ha seguido dejándose ver también en la periferia de Madrid.

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Muy conocida se ha hecho su gran pasión en la localidad madrileña de Majadahonda, donde ha acostumbrado a dejarse ver poniéndose como un toro practicando crossfit. Como uno más en el gimnasio, el que hace no mucho fuese uno de los cracks de LaLiga se mantiene a tono llegado ya a los 46 años. Su extraordinario físico, envidiable en esta nueva vida después del fútbol, ha podido comprobarse también en los últimos partidos de leyendas del Atlético, donde el búlgaro no ha dejado pasar la oportunidad de dejarse ver en ambientes mucho más distendidos a los que acostumbrada antaño.